El tercer Plan Renove de Electrodomésticos de Aragón, que ha contado con la participación de un total de 287 establecimientos, se ha agotado en poco más de mes y medio, y ha permitido sustituir más de 18.500 electrodomésticos de baja eficiencia energética, según los datos facilitados por la Cámara de Comercio de Zaragoza.

El plan, que se inició el 15 de diciembre de 2008, ha incentivado a los consumidores a sustituir sus electrodomésticos menos eficientes por otros de clase energética A o superior (A+ y A++) mediante ayudas directas.

La cuantía de las subvenciones que se descontaba a los compradores variaba desde los 50 euros por reemplazar una encimera de gas a los 125 euros por cambiar un frigorífico o frigorífico-congelador.

Las subvenciones no podía superar el 25 por ciento del coste del electrodoméstico y cada consumidor solo podía presentar una solicitud por tipo de electrodoméstico como máximo a las ayudas del plan.

A lo largo de su vida útil, un electrodoméstico de clase A puede llegar a suponer un ahorro de 600 euros en el consumo eléctrico frente a otro de la clase G.

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