La baba de caracol, el aliado perfecto para la salud y la juventud de nuestra piel

Las propiedades de la baba de caracol son infinitas.
Las propiedades de la baba de caracol son infinitas.
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Las propiedades de la baba de caracol son infinitas.

Hace unos años, la baba de caracol pegó un gran boom en España y multitud de mujeres fueron testigo de sus múltiples propiedades. Al principio mirada con recelo, rápidamente se convirtió en un imprescindible en muchos tocadores.

Por desgracia, este ingrediente cayó en el olvido. Sin embargo, las coreanas son muy devotas de este activo, siendo plenamente conscientes de sus beneficios, tal y como relatan en el libro El arte coreano del cuidado de la piel: "Se trata del Santo Grial de la cosmética coreana. Los criadores de caracoles descubrieron las propiedades de su baba al ver los suaves que tenían las manos y lo rápido que se les curaban los pequeños cortes y raspaduras que se hacían al manipularlos. Sus propiedades regenerativas hacen de la baba de caracol un ingrediente muy deseado”.

Esta sustancia es rica en colágeno, elastina, alantoína, vitaminas y ácido glicólico, por lo que no solo regenera la piel, sino que ayuda a retrasar y tratar las arrugas, mejora la elasticidad y firmeza, hidrata la piel, ilumina la piel, estimula la renovación celular, ayuda a tratar y prevenir el acné, reducir manchas, cicatrices, y cura las quemaduras.

Reconocidos dermatólogos y farmacéuticos avalan sus propiedades, sin embargo, no sirve cualquier tipo de secreción ni cualquier tipo de caracol, ya que es solamente es válido el Cryptomphalus Aspersa siendo únicamente eficaz la mucina que se obtiene en un momento específico en el que este animal responde a un estímulo mecánico.

Sus beneficios la hacen perfecta tanto para pieles maduras como las más jóvenes, dando igual que sean secas, grasas, mixtas o sensibles, ya que pueden todas sacar provecho de ella sin que se produzca algún contratiempo. Por desgracia, este ingrediente no es apto para veganos.

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