Este viernes se ha emitido en Telecinco la segunda parte de Cantora: la herencia envenenada. En esta ocasión, el formato contó con Teresa Rivera, hermana del difunto Paquirri. Además de reiterar su interés y emoción con respecto a acortar distancias con Kiko Rivera, tuvo unas palabras muy duras sobre Isabel Pantoja.

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Al principio del programa, la madre de Canales contó cuál fue el punto de inflexión en la que en un principio era una buena relación entre ambas. "Cuando volvieron del viaje de novios, ella me acusó de haber comprado un vestido de gitana y haberle pasado la factura", desveló. 

La mujer especificó que ella nunca hizo tal cosa y que su hermano tampoco llegó a dudar de ella, pues ambos se entendían con tan solo mirarse. "Mi hermano le dijo que yo no hago esas cosas". Rivera explicó que, desde ahí, no tuvo tan buena opinión sobre la pareja de su hermana. 

Pero hubo más. Y es que, contó también que en Cantora, en una ocasión, sus hijos quisieron bañarse en la piscina de la finca, cuando el guarda de la misma aseguró tener órdenes específicas de la cantante para que no entre nadie. "Le dije de todo a mi hermano", añadió.

La madre de Canales también dijo que la tonadillera es una mala persona y una teatrera. Por eso mismo, declaró que no le gustó el concurso que hizo en Supervivientes. En esa línea, aseguró que, desde que la conoció, supo que lo que más ansiaba era "poder y grandeza".

Además, dijo que no se creía cuando, en programas como Idol kids, la cantante se emocionaba cada vez que alguien cantaba Marinero de luces, tema relacionado con la muerte del torero. Rivera verificó también que, cuando su hermano falleció, llevaba dos meses en los que su relación con Isabel Pantoja se estaba viniendo abajo. "Él estaba acostumbrado a otro tipo de familia, unida, con amor... en la de Isabel no había nada de eso", dijo.

Otro de los puntos más impactantes de la entrevista fue cuando Rivera habló sobre un maletín que obsesionó a la tonadillera el día de la muerte de Paquirri. En el artículo, se encontraba el dinero que el torero había ganado en sus últimas corridas. "No pienso que una persona pueda reaccionar de esa manera, pedir el maletín cuando su marido estaba ahí, de cuerpo presente, ninguna persona normal piensa en eso", explicó.