En un comunicado, las patronales vascas han incidido en que el principal criterio para establecer medidas debe ser "el que aúne el mayor control de la pandemia con el menor impacto económico posible".

Por lo tanto, consideran que, si bien evitar la propagación de la enfermedad "constituye un objetivo ineludible de máxima prioridad, la restricción de la actividad económica derivada de ese irrenunciable control de la pandemia debe ir acompañada de medidas compensatorias rápidas y suficientes para los sectores más directamente afectados, de cuyas empresas dependen miles de puestos de trabajo, y el bienestar de miles de familias y de la sociedad vasca en general".

En ese sentido, han defendido que, "antes que medidas de restricción de la actividad, es necesario, una vez más, apelar a la responsabilidad individual para el control de la pandemia". "Si no cumplimos las medidas que todos conocemos para evitar comportamientos de riesgo en nuestro entorno familiar y social más cercano, vamos a tener más pandemia. Y sus consecuencias serán cada vez más intensas y dolorosas", han subrayado.

Finalmente, han incidido en que en Euskadi, al menos hasta el momento, los centros de trabajo no están constituyendo "un foco relevante" en la propagación de la covid. Según han indicado, "de hecho, tanto la autoridad laboral como la sanitaria reconocen el esfuerzo conjunto de empresas y trabajadores para seguir rigurosamente los protocolos establecidos dentro del centro de trabajo".