Tarantino, amenazado por el mayor sindicato policial de EE UU

Después de una larga carrera creándose enemigos, Quentin Tarantino podría haber encontrado la horma de su zapato al ganarse la enemistad de los policías de EE UU. Después de que el director participase en una protesta contra la brutalidad institucional en su país, algunos miembros de las fuerzas de orden público llamaron a boicotear en represalia el estreno de The Hateful Eight, su nueva película. Y ahora el sindicato Fraternal Order of Police (FOP), una central con más de 330.000 afiliados, amenaza con darle un susto desagradable. "Tarantino se ha hecho rico con la violencia y con las sorpresas", declara Jim Pasco, líder de FOP, a The Hollywood Reporter. "Nuestros miembros se ganan la vida luchando contra la violencia, pero la sorpresa es algo que no descartamos".

¿En qué consistirá esa "sorpresa"? Pasco no quiere dar detalles, salvo que podría ocurrir "en cualquier momento de aquí a la fecha del estreno [de The Hateful Eight]" y que "atacará a Tarantino en el único aspecto que parece importarle: el económico". El dirigente sindical también apunta que sus amenazas no incluyen la violencia física, cosa que debería resultar un alivio para Quentin: FOP es la central sindical más poderosa y numerosa en la policía de EE UU, y el hecho de que todos sus miembros lleven placa y pistola debería darle sudores fríos al más pintado. Por otra parte, sería muy irónico que la ira ante una protesta por la brutalidad policial acabase desembocando en más brutalidad por parte de los agentes de la ley, aunque éstos actuaran fuera de servicio.