El Ayuntamiento de Valladolid ha perdonado una multa de 6.010 euros a la constructora Zaratán 2000 al haber notificado fuera de plazo el expediente sancionador.

El juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 ha dado la razón a la empresa que alegó, para evitar la sanción la caducidad del expediente, lo que ha sido reconocido incluso por el propio consistorio.

El Grupo Municipal Socialista fue quien informó de este caso, lo que aprovechó para criticar la «dejadez» del área de Urbanismo que dirige Cristina Vidal, «que deja pasar los plazos administrativos hasta que el procedimiento caduca y ello impide cobrar la sanción».

Las obras sancionadas se realizan en el número 4 de la calle Gallegos, en la misma manzana, -recordó el PSOE- que el Tribunal Superior de Justicia anuló la descatalogación del edificio de Monedero, en la Bajada de la Libertad, «aunque la sentencia llegó cuando el edificio ya había sido demolido».

El expediente se inició el 31 de octubre de 2007, un año después de que un informe técnico señalase que las obras habían incumplido las condiciones de la licencia al haber eliminado una viga de madera protegida que fue sustituida por otra de hormigón.

En abril de 2008, Urbanismo califica como «grave» lo ocurrido y propone una multa de 155.253 euros (la ley permite, para los hechos graves, multas de 6.010 euros a 300.506). El promotor alega y el Ayuntamiento impone, finalmente, la sanción de 6.010 euros, la más baja.

La multa se dictó el 25 de julio de 2008, seis días antes de finalizar el plazo, por lo que la notificación, el 11 de agosto, sí llegó tarde.

No obstante, según el PSOE la infracción no ha prescrito por lo que ayer pidieron que se inicie un nuevo procedimiento sancionador «par que deje de perdonarse dinero por falta de celo de Urbanismo».

En octubre llegó dos días tarde

En el anterior caso de octubre , la notificación del Ayuntamiento llegó dos días tarde por lo que tuvo que perdonar una multa de 240.000 euros a una constructora de dos bloques de viviendas en Fuente Dorada. El expediente castigaba a la empresa por edificar pisos con dormitorios que no tenían el tamaño mínimo, lo que incumple el PGOU. El juzgado abroncó incluso a la Concejalía por justificarse argumentando que tenían mucho trabajo. Le dice que lo que deben hacer es ese caso es poner más medios.

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