De esta forma, la compañía revalida su apuesta por la mejora continua e implantación de un plan estratégico de calidad que asegura más allá del cumplimiento de los requisitos normativos, la consolidación de los objetivos establecidos y la fijación de una política integrada que refuerza los valores del entorno y las partes interesadas, destaca en una nota el gerente, Jacobo Kalitovics.
Titsa dispone desde julio del 2018 de los certificados ISO 9001 de Calidad e ISO14001 de Medio Ambiente, en su versión actualizada del año 2015 por Aenor, y con acreditación IQ-Net, sumando valor a su actividad.
Con este sistema de gestión integrada de Calidad y Medio Ambiente, la empresa de transportes pretende optimizar la operativa de la organización consiguiendo un ahorro de recursos, tanto económicos como de tiempo encaminado al desarrollo sostenible económico y medioambiental.
Estas certificaciones conllevan la obligación de velar por el cumplimiento legal, respeto y protección del medio ambiente, mejorando la competitividad y productividad y la calidad descrita en la misión y visión de la Política del Sistema de Gestión Integrada firmada por la dirección.
De esta forma, se lleva un control eficiente de los recursos y se apuesta por optimizar la eficacia de los procesos productivos.
Asimismo, la aplicación de unos estándares de calidad enfocados al aumento de la satisfacción de los usuarios, a la vez que mejora la imagen del servicio que se ofrece, aumenta la motivación y participación del personal, entre otras ventajas.
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