La dirección y el comité de empresa de Sanyo han llegado a un acuerdo económico para el despido de 42 trabajadores de la planta de Barberà del Vallès (Vallès Occidental), dedicada a la comercialización y distribución de sus productos de electrónica de consumo en España.

Fuentes sindicales han explicadoque los empleados afectados recibirán una indemnización de 58 días por año trabajado, con un máximo de 48 mensualidades, así como 6.000 euros adicionales cada uno. La multinacional japonesa presentó a mediados de enero un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) por prescindir de 42 de los 55 empleados del centro vallesà.

El acuerdo conseguido en las últimas horas entre la dirección de la compañía y los representantes de los trabajadores da vía libre a la aplicación de este expediente. Precisamente, Sanyo anunció el jueves que cesará su actividad como empresa el 31 de marzo y que abrirá una oficina en Barcelona que dependerá de la central Sanyo Fisher Sales Europe.

De este modo, las operaciones desde España pasarán a depender del centro que Sanyo tiene en Múnich (Alemania), dónde hay unas 60 personas que controlan 22 países europeos. El único país con filial propia de Sanyo será Reino Unido, que mantendrá su actual situación. El 2006 esta multinacional cerró su único centro productivo en España, a Tudela (Navarra), en el cual trabajaban unas 170 personas y que mantenía un centro de almacenamiento que será cercado.