El Consistorio pretende, por un lado, dar a conocer estas paradas a los jóvenes (ahora hay en muchas zonas pero casi nadie sabe dónde están) y, por otro, instalar nuevas paradas en dos zonas en las que no hay, como son Juan Llorens (estudian colocarla en Ángel Guimerá o Calixto III) y la avenida de Aragón.

Como explicó a 20 minutos el concejal de Circulación y Transportes, Alfonso Novo, se va a encargar a una empresa el diseño de reclamos para estas renovadas paradas. De esta forma, y si se cumplen los plazos, estarán todas instaladas este invierno.

Varias medidas

La iniciativa, promovida por la Federación de Hostelería, se une a las ya adoptadas como el bono taxi (descuentos que se entregan en restaurantes, pubs y discotecas para pagar el importe de la carrera del taxi) y el desdoblamiento de la línea nocturna de la EMT N1 para incrementar el servicio.

Contra el sol y la lluvia

Por su parte, el presidente de la asociación gremial del taxi, Antonio Muñoz, aplaudió la iniciativa y explicó que, además, están estudiando instalar marquesinas similares a las de la EMT en las paradas de taxi más transitadas de la ciudad, como en la plaza del Ayuntamiento, la calle Colón o la plaza de los Pinazo. «Queremos proteger a los clientes del sol en verano y de la lluvia en invierno mientras esperan», explicó Muñoz.

Más seguras y atractivas

Las nuevas paradas de taxi, al estar iluminadas, pretenden también incrementar la sensación de seguridad tanto para el cliente como para el taxista, así como resultar más atractivas. El sector siempre ha demandado que el Consistorio adopte medidas de seguridad.