Protestas en toda Cataluña de los trabajadores del sector cultural han sido este jueves la respuesta a la partida de 17,2 millones de euros para ayudarles que ha aprobado el Govern y que ha desgranado este mañana la consellera de Cultura, Àngels Ponsa. "No moriremos de Covid, moriremos de hambre", se podía leer en una de las pancartas de una concentración en Barcelona que ha reunido a unas 200 personas frente a la consellería.

Han convocado este acto reivindicativo, así como otros frente a varios ayuntamientos catalanes, el Sindicato de Músicos Activistas de Cataluña (SMAC!), la Asociación de Técnicos del Espectáculo de Cataluña (ATECAT) y el sindicato de técnicos Tecnicat, que en la capital catalana han leído un manifiesto al que se han adherido más de 1.000 entidades. ¿La principal reclamación? "Ayudas directas" suficientes, en forma de una renta básica universal.

Y es que los convocantes consideran cortas las que ha anunciado el Govern: un único pago de 750 euros para artistas y técnicos que tuvieran unos ingresos máximos de 18.555 euros entre enero y septiembre de 2020. La Generalitat destinará a estas ayudas 3,7 millones de euros, con lo que solo beneficiarán a unos 5.000 trabajadores, el 2,5% de los del sector cultural.

Joan Santeugini, vocal de ATECAT, se ha quejado de que las medidas del Govern "son insuficientes y no llegarán a la mayoría de trabajadores". En la misma línea se ha pronunciado Robert Ballester, vocal de Tecnicat, que ha calificado de "desesperada" la situación del sector y ha dicho que hay gente que no trabaja desde marzo. Por su parte, la actriz y directora Alicia Reyero ha lamentado que "se está estigmatizando una vez más" a la cultura.

Una reclamación más de los manifestantes ha sido la "reapertura ya" de cines, teatros y salas de conciertos. "La cultura es más segura que el Govern", rezaba otra de las pancartas que se han exhibido en Barcelona.

Al respecto, Ponsa ha dicho que la reapertura podría estar cerca si "la velocidad de propagación de la pandemia se sostiene varios días por debajo de 1, algo que va muy ligado al número de camas de UCI ocupadas y al número de contagios", si bien no se ha comprometido a dar una fecha concreta. "La cultura es segura y esencial y sin ella la dignidad de las personas se ve disminuida", ha afirmado también la consellera.

En relación a las ayudas aprobadas, ha explicado que el dinero procede del fondo de contingencia y ha asegurado que para su distribución se ha tenido en cuenta "el diálogo con el sector". En este sentido, ha explicado que su departamento se reunió el jueves de la semana pasada con representantes de 27 entidades, entre ellas la Academia Catalana de la Música, la Asociación de Actores y Directores, los profesionales del circo, de la danza, de las salas de teatro privadas, y de los festivales Ciutat Flamenco, de Jazz de Barcelona y Temporada Alta. 

La distribución de las ayudas

Ponsa y el secretario general de Cultura, Lluís Baulenas, han informado de que la mayoría de las ayudas previstas se podrán pedir a partir del 12 de noviembre, después de que el 11 se publique la convocatoria.

Además de los 3,7 millones de euros que irán dirigidos a los pagos directos de 750 euros a artistas y técnicos, hay otros 3,7 destinados a paliar la cancelación de espectáculos y actividades culturales, que se dividen en dos bloques: uno para el 40% del caché y honorarios de la compañía contratada y otro de entre el 50-60% de la taquilla prevista para los grupos que cobran por entradas vendidas".

También se publicará el 11 de noviembre otro paquete de 4,7 millones para que empresas y entidades puedan hacer frente al pago de alquileres y nóminas.

A estas ayudas se suman otros 2,1 millones para gastos estructurales de funcionamiento de equipamientos participados por la Generalitat; medio millón de euros para reforzar las ayudas por cancelación de conciertos y festivales de música y otras por gastos de estructura y programación estable de ateneos.

En el sector del cine podrán optar a las ayudas tanto personas físicas como jurídicas, o entidades privadas sin afán de lucro, que en el ámbito audiovisual tengan la titularidad y la gestión de una sala de exhibición o que sean empresas distribuidoras independientes.

En el ámbito de las artes escénicas, podrán acogerse aquellos que se dedican a la danza, el circo y el teatro.

En el de la música, lo podrán hacer los que se ocupan de "la contratación artística de los conciertos" y los que gestionan salas con programación estable de música en vivo, con un mínimo de 25 conciertos de pago por año, en los últimos tres años, sin incluir 2020.

Las ayudas, ha aclarado Baulenas, serán compatibles con las que da a los autónomos el Gobierno.