En el acto de juicio oral, tramitado como diligencias urgentes tras la denuncia que los progenitores interpusieron el pasado día 13, la defensa interesó el fallo alternativo para su patrocinado, a quien además, según consta en el acta del procedimiento se le condiciona la medida aplicada a que no cometa delito en el plazo por el que se prolonga la suspensión.

La conformidad del Ministerio Fiscal y la letrada de la acusación particular persigue evitar la entrada en prisión del procesado si bien le aleja de la vivienda que compartía con sus padres durante más de cinco años al tiempo que le obliga a seguir un tratamiento de desintoxicación, que deberá certificar con aval de un centro público o uno privado bajo homologación.

Convivencia "insoportable"

M.J.B.C., a quien se considera autor de un delito de malos tratos en el ámbito familiar y otro contra la integridad moral, se inicio en el consumo de cocaína en 2005 y, de forma paralela, comenzó a vejar a sus progenitores. Su actitud agresiva, tal y como resalta el tribunal, se intensificó, no obstante, el pasado mes de agosto al quedarse en paro y necesitar de manera constante que éstos le facilitasen dinero.

Las "frecuentes discusiones" en el domicilio familiar del barrio de El Zapillo se originaban casi siempre cuando la madre se negaba a darle lo que le pedía, momento en el que el joven solía golpearle en el estómago al tiempo que le decía que le "tenía que matar" y profería insultos como "puta" o "capulla" contra ella.

La situación descrita por el Ministerio Público en su escrito de acusación, al que se avinieron las partes, fue degenerando hasta hacer "insoportable" la convivencia con su hijo, quien arremetía "muy violento" por última vez contra la víctima el pasado día 13, a la que propinó varios empujones hasta que pudo ser sujetado por su padre.

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