Todo es mentira volvió a contar este lunes con la presencia, vía videollamada, de Aramís Fuster porque, en el mes de junio, la 'máxima autoridad' del ocultismo ya predijo que en diciembre habría un nuevo confinamiento total, algo que, para ser justos, no se aleja mucho de las previsiones de los expertos en materia de coronavirus.

Aramís, que se mostró de nuevo muy crítica con el Gobierno, e incluso pidió que los confinaran en la Moncloa, también se salió del guion para hablar de un supuesto veto en televisión, señalando que ese es el motivo por el que ha estado alejada de la pequeña pantalla estos últimos años.

"Estoy vetada en televisión desde hace dos años, como ya sabéis", aseguró la exconcursante de programas como Hotel Glam o GH VIP. "Por el enano cabezón", sostuvo, sin decir el nombre específico de esa persona. La cara de extrañeza de Risto Mejide, que matizó que en su programa no estaba vetada, y del resto de los colaboradores era evidente, aunque nadie incidió en el tema.

Eso sí, pese a que ella no quiso dar el nombre, la acusación montó un enorme revuelo entre los espectadores que comentaban en ese momento el programa en las redes sociales, que llegaron a la conclusión de que se trataba de Jorge Javier Vázquez.