El ya casi tradicionalmente polémico examen de ortografía de las pruebas de oposición a la Guardia Civil ha repetido disputa este año por un posible error en uno de los ejercicios. El asunto ha enfrentado a la RAE y a catedráticos en la materia, quienes respaldan a los opositores que piden la suspensión de la prueba.

La disputa gira en torno a la palabra 'treinta y un', dentro de la frase: “Le dije que trajese treinta y un comensales y no veintiuno”. Al parecer, las quejas se centran en que no hay concordancia entre 'treinta y un' y 'veintiuno'.

El denunciante ha explicado a El Heraldo que "después de haber consultado a varios catedráticos de la materia y haciéndoles expuesto la situación, nos han confirmado que la palabra 'treinta y un' puede tener múltiples grafías, pero en este caso estaría mal debido a que no concuerda con 'veintiuno' que es la que le precede".

La RAE acepta establece que los números hasta el 30 deberían ser escritos en una sola palabra (por eso 'veintiuno' sería correcto), pero a partir de ahí “los cardinales se escriben en varias palabras”. Sin embargo, se admiten excepciones como 'treintaiún', igual de válido que 'treinta y un'. La Fundeu suscribe esta norma y admite las dos grafías.

La polémica generada ha suscitado denuncias y fuertes quejas que podrían amenazar con la suspensión del examen. Los opositores que se enfrentaron a la prueba aseguran que no es la primera vez que hay problemas con ella, y que esta debería ser suspendida por "generar confusión" y no ser clara.