Donald Trump y Joe Biden se enfrentarán en las elecciones del próximo 3 de noviembre de 2020, una votación que decidirá quién de los dos ocupará el cargo de presidente de los Estados Unidos.
Joe Biden es el candidato por el partido demócrata, el partido con ideales progresistas, al contrario que el partido republicano, que tiene como candidato a Donald Trump y defiende ideales conservadores.
Así, los programas electorales de ambos partidos son muy diferentes, en ocasiones completamente opuestos. Estas son algunas de las diferencias que tienen entre sí el partido republicano de Trump y el partido demócrata de Biden.
¿Qué diferencias hay entre el partido republicano y el demócrata?
Lo primero que hay que saber respecto a los dos principales partidos de Estados Unidos es que el partido demócrata defiende una línea ideológica más progresista, mientras que el partido republicano es más conservador.
Uno de los temas de mayor actualidad en los debates entre Trump y Biden ha sido la gestión del coronavirus, que ha marcado sendas diferencias entre ambos. Por un lado, Biden defiende que hay que tenerle respeto al coronavirus, que hay que impulsar el uso obligatorio de la mascarilla, "escuchar a la ciencia" y, sobre todo, proporcionar una guía nacional clara, coherente y basada en la evidencia, según la propia web del partido. Por su parte, Trump asegura que no hay que tenerle miedo al virus y deja que cada estado decida si se debe o no imponer el uso obligatorio de mascarilla.
Otra de las políticas completamente contrarias entre Trump y Biden es la referente a la energía, el medioambiente y el cambio climático. Trump asegura que la política contra el cambio climático de los demócratas supone una pérdida de empleos en el país, según la web del partido. Los demócratas, por su parte, aseguran que este problema "representa una amenaza real y urgente" para la economía, la seguridad nacional, la salud y el futuro de los hijos. Los republicanos creen que eliminar las medidas "irrazonables" a la producción de energía estadounidense puede contribuir a reactivar la economía y dejar así de depender del petróleo de Oriente Medio.
La inmigración es otra de las cuestiones que enfrentan a ambos partidos históricamente. Trump lleva a cabo una política que rechaza completamente la inmigración ilegal, de hecho, una de sus propuestas fue la creación de un muro en la frontera de México y antepone los intereses de los estadounidenses frente a los extranjeros. Biden y su partido se muestran en contra de estas medidas.
Para Trump y Biden, el sistema sanitario también presenta contrariedades. De hecho, el partido republicano critica enormemente la ley para la protección del paciente y atención médica asequible que se aprobó durante el mandato de Obama y quieren un sistema de libre mercado.
El aborto es otro de los temas en los que tienen posturas completamente opuestas. Trump plantea poner todas las trabas posibles para el aborto y está en contra de la sentencia que legalizó el aborto en el país. Por su parte, Biden defiende el derecho de cada mujer a tomar su propia decisión a la hora de abortar o no.
La fuerza militar para Biden debe usarse como "último recurso", mientras que Trump hace alza de la defensa nacional: "Nuestro personal militar debe seguir siendo los soldados mejor equipados, entrenados y sofisticados del mundo", dando una mayor importancia al cuerpo militar que, para el partido republicano, sirve como una "poderosa disuasión" para sus "enemigos".
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