A colación, Raúl Fernández Hicke, secretario general de la sección de CGT en Tussam, explicaba a Europa Press que el comité de empresa celebraba el lunes la reunión prevista con la dirección de la entidad, en torno a las reivindicaciones relativas al empleo temporal de los miembros de la bolsa de trabajo, el demandado "plan de jubilaciones" y el cumplimiento de los acuerdos relativos "al incremento de las cuantías económicas de los trabajadores".

Durante las últimas movilizaciones, los sindicatos de Tussam habían trasladado un escrito al concejal de Movilidad y presidente del consejo de administración de la empresa, Juan Carlos Cabrera (PSOE), rememorando el acuerdo suscrito por dicho edil en enero, antes de irrumpir la pandemia y el estado de alarma decretado para combatirla, que en el caso de Tussam se tradujo en una drástica bajada en el número de viajeros y en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).

Aquel acuerdo, recordémoslo, intentaba esquivar las consecuencias de la temida "falta de financiación" de la empresa de cara al entonces nuevo ejercicio de 2020. Aunque para 2020 las cuentas de Tussam crecían de 116,6 a 121,9 millones de euros, subiendo de 72,2 a 80,9 millones el dinero destinado a la plantilla gracias a un alza del 9,5 por ciento en las transferencias del Ayuntamiento, los sindicatos avisaban entonces de que los presupuestos serían insuficientes y temían la posible "externalización" de líneas y la no renovación de los contratos de los trabajadores temporales incorporados merced a la bolsa de empleo.

EL ACUERDO DE ENERO

En ese sentido, el comité exponía en el citado escrito a Cabrera que aquel acuerdo implicaba "la aplicación e incremento de las cuantías económicas de los trabajadores, detallándose que las revisiones se trasladaban al último trimestre del año, con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2020", mediante "una modificación del presupuesto municipal incrementando las transferencias a la empresa en un importe equivalente al incremento que resulte de aplicación", para "evitar el desequilibrio presupuestario".

Además, el comité de empresa señalaba la falta de "expectativas" de los miembros de la bolsa de empleo promovida en 2018 por Tussam para contar con 200 aspirantes a conductor, frente a sus necesidades eventuales de recursos humanos, dadas las fechas de finalización de sus contrataciones entre septiembre, octubre y enero. Todo ello cuando está "inmovilizado el plan de jubilación" de la plantilla, según los sindicatos.

Así, el comité de empresa reclamaba a Cabrera "el abono del porcentaje especificado en los acuerdos alcanzados en enero", un "plan de jubilación y contratación que permita el desbloqueo de las bolsas de trabajo y rejuvenecer a la plantilla" y detener "la contratación de personal privado en la sección de Limpieza y Repostado".

LOS PGE

Respecto al aspecto salarial, el comité defiende que sus reivindicaciones se ciñen a lo estipulado por los Presupuestos Generales del Estado, toda vez que el pacto invocado por el comité fue alcanzado después de la aprobación del Real Decreto-ley 2/2020 de medidas urgentes en materia de retribuciones en el ámbito del sector público, según el cual "en 2020, las retribuciones del personal al servicio del sector público no podrán experimentar un incremento global superior al 2 por ciento".

Frente a ello, el Gobierno local del PSOE esgrime que garantizará la "solidez financiera" de la entidad ante la caída de ingresos derivada de la pérdida de viajeros por la pandemia, recordando asimismo que los sindicatos reclaman el "incremento salarial" acordado antes de irrumpir el virus y que hay en marcha transferencias extraordinarias ante las "tensiones de tesorería" de la empresa.

En ese sentido, el último pleno ordinario celebrado por el Ayuntamiento incluyó la aprobación de una transferencia de 6,5 millones de euros desde los fondos municipales a Tussam, que se suma a una anterior de un millón de euros, para contrarrestar la pérdida de ingresos de la empresa por la caída en el número de viajeros.