El Gobierno de Aragón ha decretado el confinamiento perimetral de la capital oscense desde las 00.00 horas de este jueves debido al alto nivel de contagios de coronavirus que se estaban produciendo en los últimos días y la existencia de transmisión comunitaria. La capital altoaragonesa, igual que las ciudades de Zaragoza y Teruel, han quedado confinadas desde esta pasada medianoche.

Un operativo coordinado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado controla los accesos y salidas por las autovías A-22 a Lleida y A-23 -que permite la conexión con Zaragoza y el Jaca- y va a prestar especial atención a las horas de mayor tráfico.

Este dispositivo tiene en cuenta la situación de las localidades colindantes a Huesca cuyos vecinos requieren el desplazamiento a la capital para acceder a servicios básicos como la alimentación o la farmacia.

Además, los paneles de señalización variables de la Dirección General de Tráfico ofrecen información sobre los confinamientos, recordando que solo están permitidos los viajes justificados. Estos paneles están ubicados en la A-23 y la N-240 en Huesca; en la A-23 en Albentosa y Caudé; y en las vías A-2, A-23, A-68, N-232, N-330 y Z-40.

El Gobierno de Aragón ha notificado 898 positivos en las últimas horas. Por provincias, 600 de los nuevos casos se corresponden con la de Zaragoza, 149 con la de Huesca y 133 con la de Teruel.

De los nuevos casos referidos, el 54 por ciento son mujeres y el 46 por ciento hombres. En cuanto a los ocho sectores sanitarios, en los tres de la capital aragonesa se han detectado 530 casos nuevos, el 59,01% del total, mientras que el de Huesca 92, el 10,24%, Teruel, 94, el 10,47%, Barbastro, 43, el 4,79%, Calatayud 42, el 4,68%, y Alcañiz 41, el 4,57. El martes permanecían ingresados en los hospitales 594 enfermos de COVID-19, 14 más que la jornada anterior, 76 de ellos en la UCI, dos más que el día anterior.