Seis personas permanecieron retenidas durante dos horas en una vivienda de Benalmádena (Málaga) por unos ladrones que se confundieron de casa.

Ocurrió en la madrugada del sábado al domingo, sobre las 2.00 horas. Dos parejas habían pasado la noche en la vivienda. Cuando una de ellas se disponía a marcharse y eran despedidos desde la puerta, tres encapuchados con pistolas aparecieron e intimidaron al grupo.

Ataron y esposaron a tres personas, mientras las hijas de una de las parejas permanecían dormidas. Los asaltantes comunicaron a sus víctimas que habían atado al vigilante. Entones las parejas comprendieron que los cacos se habían confundido, porque carecen de guardia de seguridad, según publica Sur este martes.

Durante dos horas, los cacos registraron la casa en busca de una caja fuerte inexistente. Uno de ellos habló varias veces por teléfono con otro miembro de la banda, pero las indicaciones que le daba eran infructuosas.

Pasaba el tiempo y los ladrones empezaban a comprender su error. Uno pidió tabaco a una de las mujeres. Amenazó con "sacar" a las niñas, pero otro asaltante le advirtió que a las niñas no se las "tocaba", según el relato de las víctimas.

Se dispusieron a sustraer un ordenador portátil de uno de los hombres, el cual les pidió sacar unas fotos del disco duro. Finalmente los cacos no se lo llevaron. Tampoco se apropiaron de otros dos ordenadores cuando los dueños les dijeron que eran de sus hijas.

Situaciones surrealistas y amenazas

Las víctimas intentaron explicarles que no tenían caja fuerte porque no eran gente de dinero. «A ellos les pareció que la cocina era lujosa y yo les aclaré que era de Ikea", cuenta una de las mujeres.

Al marcharse los asaltantes cogieron un cable de la X-Box para inmovilizar a uno de los retenidos. "Él les pidió por favor que no se lo rompieran, así que lo ataron con un mando del videojuego colgando, para no tener que destrozarlo. Mientras anudaban los cables, nos iban preguntando si nos dolía, si estaba demasiado apretado...", apostilla la mujer.

Uno de los cacos dijo a sus víctimas que ellos eran "buena gente", pero que "habían tenido" que dedicarse a esos menesteres, "aunque eran novatos". Uno de los asaltantes llegó a amenazar con cortar una oreja a un hombre.

Finalmente, el botín que sustrajeron los ladrones fue un poco de dinero, unas cuantas joyas, y dos automóviles de segunda mano (un BMW 530 de color negro, matrícula 5106-FSN y un Golf azul marino, B-3166-WW). Ninguno de los vehículos ha sido encontrado aún. Si los encuentra, llame al 091.

Indicaron a sus dueños que recuperarían los coches en los próximos días y, antes de irse, preguntaron por dónde se salía para ir hacia Benalmádena.