Desde mediados de 2019 la compañía investiga una nueva tecnología que permita primero, aislar, y luego, obtener, nanocelulosa a partir de los residuos que se extraen del cribado de fangos de las estaciones depuradoras de aguas residuales, ha informado el grupo este miércoles en un comunicado.
El grupo de origen leridano asegura que la nanocelulosa servirá luego de materia prima para nuevos procesos de la industria y precisa que esta investigación se desarrolla bajo el nombre de Beyond Waste.
En 2019, el grupo ha iniciado además un particular proyecto de desarrollo y comercialización de monodosis de aceite de oliva con envasado biodegradable, con el objetivo de generar soluciones que reduzcan el uso de plásticos en envases de un solo uso.
Junto con una start-up de Hungría, Platio, también trabaja en un proyecto que busca sustituir el pavimento convencional por uno que recoge energía solar para convertirla en electricidad, del que está desarrollando una prueba piloto con el Ayuntamiento de Barcelona para evaluar su rendimiento.
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