Tres años después de la entrada en vigor de la ley antitabaco, muchos hosteleros siguen haciendo caso omiso de la normativa.

Pero los ciudadanos cada vez son menos permisivos y se atreven a tomar la iniciativa y a denunciar más.

De las 672 inspecciones realizadas por la Agencia de Sanidad Ambiental y Consumo del Principado el año pasado, el36% (243) estuvieron motivadas por alguna denuncia. El resto, estaban programadas.

Según los últimos datos aportados por la Consejería de Salud, desde 2006 las inspecciones a los bares asturianos

En total, en este periodo se realizaron 1.132 investigaciones, la mayoría (703) por denuncias.

Mientras, los expedientes sancionadores abiertos se han duplicado. Si en 2006 fueron 106, e año pasado la cifra aumentó hasta los 208. Y eso que al finalizar 2008 aún quedaban 78 casos cuya  valoración aún no se había iniciado.

Además, sólo tres denuncias fueron archivadas, cuando en 2007 habían sido 90.

Motivos de denuncia

En cuanto a los principales motivos de denuncia, los hosteleros vuelven a tropezar con la misma piedra.

Ausencia de los carteles correspondientes, permitir fumar en lugares prohibidos, la falta de separación de los espacios, así como la venta de tabaco en lugares no autorizados siguen siendo las infracciones más comunes detectadas en los establecimientos del Principado.

De hecho, cada vez son más los bares en los que ya no hace falta pedir al camarero que active la máquina para poder sacar tabaco. Y las hay incluso colocadas en

La ley antitabaco tampoco ha frenado la venta de cigarrillos en la región. Hasta el 31 de octubre se habían vendido en Asturias 84,5millones de cigarrillos, un 3,7% más que en el mismo periodo de 2006.

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