Urkullu ha intervenido esta tarde, vía telemática, en una sesión de la Global Taskforce de Gobiernos Locales y Regionales, en representación del Gobierno Vasco y en calidad de presidente de la Red Regions 4.

En la reunión se ha analizado un informe sobre "El futuro que queremos, la ONU que necesitamos", en respuesta a la consulta lanzada por Naciones Unidas con ocasión de su 75 Aniversario.

En su intervención, el Lehendakari se ha referido al nuevo escenario internacional marcado por la Covid 19, y ha indicado que las lecciones aprendidas en respuesta a esta pandemia, "así como la oportunidad de compartir las prioridades que planteamos", pueden representar un punto de inflexión de cara a la nueva visión de Naciones Unidas, a quien ha ofrecido todo el apoyo, compromiso y voluntad política "para contribuir a transformar el mundo en el horizonte 2045"·

Además, ha ido desgranando, una a una, las prioridades inmediatas para responder a la pandemia: compromiso sanitario con la atención primaria; compromiso colectivo para establecer burbujas sociales, educativas y laborales; compromiso personal con el uso de las mascarillas, la higiene y la distancia interpersonal; y compromiso público para limitar la movilidad y las relaciones interpersonales.

"Nuestra propuesta es transformar desde la base, desde dentro. Desde nuestros Gobiernos aportamos la experiencia de cercanía a las personas y planteamos participar en el nuevo modelo de gobernanza colaborativa de Naciones Unidas que necesitamos para construir juntos el futuro que queremos", ha manifestado.

En esta línea, ha apuntado que la Covid-19 "evidencia la interdependencia del mundo en que vivimos. Esta es una prioridad que nos acerca y compromete por igual a todas las Naciones del mundo".

A su juicio, la respuesta a este desafío, y las transformaciones que va a originar, son una "oportunidad para la gobernanza colaborativa con visión global que representa Naciones Unidas", modelo que, según ha resaltado, Euskadi Basque Country y la Red "Regiones 4" comparten.

"La respuesta presente y futura a la pandemia; unida a los retos de la emergencia climática, los movimientos migratorios, la lucha contra la pobreza o la promoción de un desarrollo sostenible son oportunidades para una nueva concepción de la gobernanza", ha explicado, para añadir que se trata de "una oportunidad para recuperar los valores fundacionales de Naciones Unidas y para incorporar a su red de gobernanza global todo el potencial institucional con que contamos".

"Este ha sido el objetivo de nuestra aportación: contribuir a construir la nueva visión de Naciones Unidas desde la base; abriendo la participación a los Gobiernos que nos encontramos más próximos a las demandas, necesidades y deseos de las personas. Gobiernos regionales, sub-estatales o que representamos a realidades nacionales y queremos participar directamente en esta nueva etapa de Naciones Unidas", ha precisado.

"DIMENSIÓN HUMANA"

Tras señalar que su aportación se integra en la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible que comparte, ha apostado por una respuesta "de cercanía y proximidad, esto es, una apuesta por la dimensión humana".

Según ha indicado, la "visión de cercanía" les permite destacar también las lecciones aprendidas para recuperarnos de esta pandemia: inversión pública en los servicios esenciales de salud, educación, protección social y atención socio-sanitaria; planes de choque para mantener la actividad y el empleo en los sectores más afectados: industria, comercio, hostelería, turismo o cultura; transformación productiva primando la economía circular, el kilómetro cero y el consumo de proximidad; e inversión en innovación, investigación y desarrollo, especialmente en el sector de la salud y la calidad de vida.

"El Gobierno Vasco y la Red 'Regions 4' apostamos por implicar a nuestras comunidades en una respuesta a la pandemia asentada sobre el rigor y la corresponsabilidad. Ofrecemos todo nuestro apoyo, compromiso y voluntad política para colaborar con Naciones Unidas y contribuir a transformar el mundo en el horizonte 2045", ha dicho, para aseverar que las lecciones aprendidas en respuesta a la pandemia y la oportunidad de compartir las prioridades que plantean, puede representar un "punto de inflexión" de cara al futuro de Naciones Unidas.

"Nuestra propuesta es transformar desde la base, desde dentro. Desde nuestros Gobiernos aportamos la experiencia de cercanía a las personas y planteamos participar en el nuevo modelo de gobernanza colaborativa de Naciones Unidas que necesitamos para construir juntos el futuro que queremos", ha insistido.