Giménez ha sostenido que "no es rentable plantar los puestos dos días en la misma ubicación", por ello plantean mantener el mercadillo de los martes, en el entorno de San Jorge y llevarlo los sábados o bien al paseo Ramón y Cajal, donde estuvieron hace tiempo, y cuyas obras obligaron a trasladarse, o bien a la calle Obispo Pintado, donde también han instalado sus puestos en alguna ocasión.
El portavoz de dicho colectivo ha expuesto que "el alcalde dijo que cuando acabaran las obras del paseo Ramón y Cajal volveríamos a esa ubicación, pero ofrecemos también la posibilidad de ir a la calle Obispo Pintado, porque tanto en uno como en otro emplazamiento podemos recuperar economía durante los sábados para poder trabajar y pagar".
Para valorar la situación y acordar el traslado, los vendedores ambulantes han pedido una reunión con los representantes municipales del Consistorio oscense.
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