Así lo ha explicado en rueda de prensa el portavoz del Ejecutivo, Julio Pérez, que ha señalado que el plan prevé una inversión inicial de 5.725,7 millones de euros en las islas hasta 2023, de los que 1.425 millones se reservan al ejercicio 2020 con ficha ya cerrada -440 millones irán a gasto sanitario y sociosanitario-.

El planteamiento inicial es que sea aprobado por el Consejo de Gobierno el próximo 1 de octubre para luego ser debatido en la Cámara autonómica en el pleno del día 27.

Pérez ha comentado que las líneas maestras del documento pasan por el mantenimiento y rerfuerzo de los servicios básicos para luchar contra la pandemia de coronavirus y la recuperación de la economía a través de su transformación hacia la digitalización y sostenibilidad, siguiendo la filosofía del fondo de reconstrucción comunitario.

Además, llevará al máximo las posibilidades del REF y el Estatuto de Autonomía con el fin de revitalizar la economía isleña.

Para este 2020, mayores, mujeres, pobreza infantil, víctimas de malos tratos, discapacitados, dependientes, migrantes o colectivos LGTBI dispondrán de 45 millones, para el impulso económico y empresarial se reservan 547,38 millones y para la recuperación y el mantenimiento del empleo son 190,84.

Además, la simplificación y coordinación administrativa, por su parte, acapara 200,5 millones, con los que se pretende facilitar los proyectos y licencias, ahorrar pasos burocráticos y dinamizar así la economía y el empleo, y otros 500.000 euros para la Agenda 2030 de Canarias.

Para alcanzar los 1.425 millones, se han incluido 373 millones no reembolsables que corresponden al archipiélago del Fondo COVID aprobado por el Gobierno central para compensar los aumentos de los gastos en sanidad, educación y transporte.

Asimismo, se introducen 176 millones para cubrir la reducción de la recaudación tributaria en las islas y hasta 389 millones por autorizarse el uso de superávit de ejercicios anteriores de la Comunidad Autónoma.

Esa cifra se aplica por la merma de ingresos por impuestos propios o derivados del Bloque de Financiación Canario en este 2020.

Para este ejercicio, el Gobierno central también aporta 14 millones con el fin de reforzar los servicios sociales, en función del Real Decreto 8/2020 del 17 de marzo y el Ejecutivo canario ha reajustado 100 millones del presupuesto regional vigente, cantidad que se añade a otros 373 millones obtenidos de partidas contempladas en esas cuentas que se consideran útiles ante lo sucedido por la pandemia de la COVID-19.

3.400 MILLONES EN TRES AÑOS

El Gobierno canario, según ha comentado Pérez, calcula para el periodo 2021-2023 un total de 3.400,7 millones de euros, con un refuerzo financiero total de 900 millones en servicios esenciales (sanidad, educación, derechos sociales y vivienda), lo que da un resultado global de gasto para 2021-2023 de 4.300,7 millones de euros.

Para la reactivación económica y la generación de empleo se proyecta, de momento, un desembolso de hasta 2.028 millones para el reimpulso empresarial y económico y de 741 millones para el empleo.

En los casos de la Agenda 2030 y de la agilización administrativa, lo más relevante son las medidas relacionadas con la progresiva implantación e incorporación de esas acciones a los procesos de gestión pública por lo que la ficha financiera tiene un papel secundario.

El Gobierno confía en aumentar los fondos a través de los próximos Presupuestos Generales del Estado, el plan de la UE 'Next Generation' -se aspira a un global de hasta 3.750 millones-, y los fondos estructurales de los periodos 2014-20 y 2021-27.

Con el fin de que los efectos de la COVID-19 fueran los mínimos posibles manteniéndose los gastos públicos, el Gobierno regional ha inyectado hasta ahora, en 2020, unos 8.067 millones en la economía isleña, mientras que los cabildos han aportado 1.652 millones y los consistorios, 2.106 millones.

Junto al Ejecutivo central, el esfuerzo global en el archipiélago asciende a 16.800 millones.