EL INTERCAMBIO: SE BUSCA HIJO Y ESTATUILLA
Desde que, en 1992, se estrenara Sin perdón, las películas dirigidas por Clint Eastwood han sumado 30 candidaturas al Oscar, y han conseguido dos estatuillas a la mejor película y otras dos al mejor director. El Intercambio engordará casi con seguridad esta lista, lo que no incluye necesariamente a la película entre lo mejor de su autor.  

Basada en la historia real de los crímenes de Wineville, El Intercambio se sitúa en 1928 en Los Ángeles. Una madre soltera y su hijo comparten felizmente su vida hasta que, al volver del trabajo, el personaje interpretado por Angelina Jolie descubre que el niño ha desaparecido.   

Unos meses después, y para frenar la creciente espiral de críticas por su incapacidad y corrupción, la Policía devuelve el niño a su madre. Sin embargo, ésta asegura que el pequeño no es su hijo: enfrentada a las fuerzas del orden y desprestigiada por la opinión pública, el personaje de Jolie comienza así su descenso a los infiernos.

Pasaporte al Oscar
Humillada por un sistema machista que la insulta, desprestigia y, al final, la encierra en una institución mental, Jolie interpreta uno de esos personajes con el sello del Oscar marcado en la frente. Eastwood, gracias a quien disfrutamos del Kevin Costner de Un mundo perfecto, los Hillary Swank y Morgan Freeman de Million Dollar Baby o, simplemente, todo el reparto de Mystic River, se ve arrastrado esta vez por el estrellato de su protagonista. Tantos sufrimientos, gritos, desesperación y valor sumen al espectador en un espectáculo similar al de una sobremesa dominical de televisión.

Empeñados en contar en una sola película una epopeya feminista, una denuncia al sistema y, por momentos, hasta una cinta de terror, Eastwood y su guionista, J. Michael Straczynski rodean a Angelina Jolie de personajes que, de tan malvados, terminan por convertir la historia en una caricatura. Se salvan, sin embargo, el sacerdote encarnado por John Malkovich y el asesino al que presta rostro Jason Butler Harner.  

Acostumbrado a saltar como director de un género a otro con la misma elegancia con la que pasa de un lado a otro de la cámara, Eastwood no alcanza esta vez las cotas alcanzadas por muchas de sus películas. Pese a todo, El Intercambio gustará a los que empaticen fácilmente con protagonistas sufridas y a aquellos que se dejen influenciar por los premios: de momento, su director estuvo a punto de llevarse la Palma de Oro de Cannes y Angelina Jolie es candidata al Globo de Oro a la mejor actriz.

EE UU, 2008. Dir.: Clint Eastwood. Int.:_Angelina Jolie, John Malkovich, Jason Butler Harner. Dur.: 141 min.

DI QUE SÍ: EL SHOW DE CARREY
Como buena estrella, Jim Carrey es uno de esos actores que acaparan un proyecto. Con él no se habla de película a secas, sino de «película de Jim Carrey». En Di que sí, la historia se repite: es difícil encontrar un fotograma en el que el actor no despliegue su catálogo de muecas y verborragia.
 
Muy en la línea de Como Dios o Mentiroso, mentiroso, Di que sí cuenta los problemas de un tipo obligado a aceptar todos los planes que le proponen. Abandonado por su chica y con una nula vida social, un curso de autoayuda impartido por un gurú (interpretado por Terence Stamp) cambiará su solitaria vida.

El proceso es previsible: primero los efectos benéficos del cambio, luego unos toques románticos, después los problemas de un sí demasiado fácil y, finalmente, la redención.
 
La revelación de la cinta es su protagonista femenina, Zooey Deschanel. Actriz en El incidente y también músico, aporta los momentos más originales de esta exhibición del descontrolado Carrey.

EE UU, 2008. Dir.: Peyton Reed. Int.: Jim Carrey, Z. Deschanel. Dur.: 104 min.

LA SOMBRA DEL ICEBERG: AUTOPSIA DE UNA FOTO
Según la historia oficial, el 5 de septiembre de 1936, Robert Capa captó una imagen histórica sobre la Guerra Civil: la muerte de un miliciano en Cerro Muriano. Ahora, Hugo Doménech y Raúl Montesinos Riebenbauer revelan los secretos que esconde la foto. Según Riebenbauer, «emprendimos un viaje no para desmitificar, sino para encontrar respuestas que compartir con el espectador».
España, 2007. Dir.: Hugo Doménech y Raúl Montesinos. Dur.: 76 min.