"Si la Junta firma el Convenio, en un par de semanas tenemos a los trenes circulando por la nueva vía", ha añadido. En el transcurso de una visita a la localidad de Osuna, donde ha tenido lugar la celebración de una Junta Local de Seguridad, el subdelegado del Gobierno se ha referido, a preguntas de los periodistas, al retraso que acumula ya la puesta en funcionamiento de la nueva variante ferroviaria de Aguadulce, que "se encuentra paralizada a la espera de que el Gobierno andaluz refrende el Convenio que permite su uso".

En un comunicado, la Subdelegación del Gobierno señala que las bases del convenio se acordaron el día 25 de febrero tras una reunión celebrada en el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), en la que participó la consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, Marifrán Carazo, además de los alcaldes de Osuna, Pedrera, Arahal y Marchena, y tras la que la propia consejera declaró que se había "desbloqueado la situación".

Señala que de la citada reunión salió el compromiso de firmar un convenio, "que desde el 28 de febrero está en manos de la Junta", que permitiría la integración de la variante de Aguadulce -actualmente de titularidad de la Junta de Andalucía- en la Red Ferroviaria de Interés General a cambio de una cantidad económica acordada, y que deben firmar la Junta de Andalucía y el Mitma.

De esta manera, el tramo pasaría a formar parte de la línea convencional Bifurcación de Utrera-Fuente de Piedra y los trenes podrían volver a circular por ella.

"Pero desde entonces", ha indicado Toscano, "los vecinos de la comarca sevillana se han quedado sin poder hacer uso de dicha vía y siguen esperando el paso decisivo: que la Junta firme de una vez el convenio".

La firma del convenio posibilitaría, tal como señala, el restablecimiento de la citada vía convencional tras la reapertura del tramo que quedó paralizado como consecuencia de los daños sufridos por la vía del tren tras las fuertes lluvias caídas en la zona en octubre de 2018.

En dicho tramo, la llamada variante de Aguadulce, ADIF realizó una inversión de más de 7,5 millones de euros para, además de restituir el trazado afectado, mejorar su calidad y suprimir siete pasos a nivel, incrementando así la seguridad del tramo, cuyas obras quedaron finalizadas en marzo de 2019.

Así, desde el final de dichas obras, los vecinos de la campiña sevillana vienen reclamando el restablecimiento de un servicio ferroviario que "ha quedado bloqueado por la Junta de Andalucía, que impone un secuestro mudo a la movilidad de estas poblaciones, evitando firmar un convenio que tiene sobre su mesa desde el 28 de febrero".