Cada 22 de diciembre, la voz de unos niños de uniforme se convierte en la banda sonora de un día lleno de ilusiones. Son los niños del colegio de San Ildefonso que ya han empezado sus últimos preparativos para que les salga todo perfecto en el sorteo de la lotería de Navidad del próximo lunes.

Los niños cantores de la suerte ya realizaron este martes un ensayo general en el salón de actos de su centro escolar y el viernes se acercarán al propio salón de loterías de la calle Guzmán el Bueno de Madrid para probar sus voces unos días antes del gran sorteo. El Gordo ya sonará entonces, aunque no se podrá saber el número ya que el ensayo se celebrará a puerta cerrada.

En total son 36 niños los que participarán en el sorteo. Hay 20 niñas y 16 niños (cuatro alumnos por tabla, como siempre) con edades comprendidas entre los 11 y los 13 años y proceden, además de España, de otros países como Ecuador, Colombia, Marruecos, Bielorrusia o Guinea Ecuatorial. Cantarán la mitad de ellos (12 niñas y 6 niños). Todos ellos empezaron las pruebas para el sorteo desde finales de octubre.

Nervios y más nervios

Los nervios ya se reflejan en sus caras aunque hay algunos con experiencia. "A mis compañeros les digo que no se pongan nerviosos, que luego todo sale bien", dice a Efe Raúl, el joven marroquí que cantó el año pasado el Gordo, algo que no cree que vuelva a pasar este año porque "sería mucha suerte". Nunca se sabe.

Raúl fue el último 'niño de la suerte' que tuvo el privilegio de cantar el primer premio de un sorteo de Navidad. El primero fue Diego López, que entró en la historia el 9 de marzo de 1771 al ser el primer niño de San Ildefonso que cantó un número premiado de la lotería española. Desde entonces, los niños de esta residencia situada en la calle Alfonso VI de Madrid se han encargado de repartir la suerte en cada sorteo de Lotería Nacional.