El actor francés Gérard Depardieu vuelve a tener problemas con la ley tras haber sido detenido hace unos días por conducir en evidente estado de embriaguez una motocicleta de pequeña cilindrada.

Según informa Le Point, el polémico intérprete, de 71 años, fue sorprendido cuando transitaba por la avenue du Maine de París, situada en el distrito 14 de la capital gala, a bordo de una scooter.

Entonces, varios agentes le ordenaron que detuviera su marcha al ver que se había saltado un semáforo en rojo e iba cambiando de carril sin ton ni son.

Allí mismo se le realizó la prueba de alcoholemia, que no dio lugar a ninguna duda: positivo. El actor de Asterix y Obelix admitió entonces que había bebido dos cervezas. Posteriormente fue trasladado hasta la comisaría, donde fue recogido por unos amigos tras dar un resultado de 0,40mg/l en una segunda prueba.

Según la misma información, el actor le hizo una sorprendente revelación a los agentes: "Ya no deseo ser francés. Prefiero a Vladimir Putin". Hay que recordar que, en el año 2013, el presidente ruso le concedió la nacionalidad.