El 2008 no ha sido un buen año para el bolsillo de los sevillanos. La crisis también ha causado estragos en los precios. Así, los productos básicos en la cesta de la compra se han encarecido este año una media del 500%, desde su precio de origen hasta que llegan al consumidor.

Éste es uno de los datos más llamativos del Balance del Sector Agrícola Sevillano que presentó ayer COAG- Sevilla. Según el último Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos (Ipod) de noviembre, los precios «más abusivos» afectan a los cítricos. La naranja, los agricultores la venden a 13 céntimos y el consumidor paga 1,60 el kilo. El limón lo venden a15 céntimos y se paga 2 euros en el mercado, es decir, un 1.307% más. Y el tomate de ensalada, que lo venden a 0,76 céntimos, cuesta 2,15 euros en el súper.

:COAG achaca esta «crisis de precios» a la «subida desorbitada» de los costes de producción para los agricultores ocasionados «por la manipulación de las grandes cadenas agroalimentarias que nos imponen esos precios ridículos», dice José Antonio García, responsable provincial de COAG-Sevilla. «Pedimos una Ley de márgenes comerciales que regule un reparto equitativo de los precios para que al final un tomate no llegue tan caro al consumidor».

Juan Diego Gavira, fruticultor en Los Palacios, explica que «el gasóleo nos ha subido este año un 30%, los fertilizantes casi un 200%. Sin embargo vendemos a precios muy bajos. Yo cobro los mimos precios que cobraba mi padre hace 20 años. Vendo melocotones a 40 céntimos que cuestan 4 euros el kilo en el mercado. Así, baja el consumo y bajan también nuestras ventas».

Harán un estudio de pérdidas

La crisis de los precios ha afectado también a la producción. En Sevilla la aceituna de mesa será uno de los sectores más afectados. La producción de aceituna esta campaña se situará en las 220.000 toneladas, un 20% menos que la anterior. Por eso, COAG elaborará a final de año un estudio para valorar las pérdidas en ventas.

El cereal es otro de los sectores azotados por la crisis. Las previsiones apuntan a un descenso en la siembra de trigo. Aquilino Roldán, agricultor en Carmona, explica que «este año los precios de origen han caído hasta niveles de hace 15 años pero la superficie de cultivo se ha incrementado. El trigo y el girasol están almacenados, sin venderse. Nadie nos compra ahora mismo cereal", apunta.

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