En un comunicado, señala que "dos días antes, la supuesta agresora se acercó al centro de salud solicitando cita urgente para realizar un trámite administrativo". "Pese a la situación de saturación en la atención mixta -telefónica y presencial para casos que así lo precisan- debido al escenario Covid-19, se le permitió a la paciente que la médico realizase dicho trámite. Sin embargo, regresó al centro porque había una errata en el documento oficial y exigía la corrección inmediata e 'in situ'".

"Con una demora asistencial de casi 15 días debido a la nula cobertura estival en el centro, lo que provoca un estado de tensión cada vez más creciente entre la población, la facultativa le comunicó que no podía realizar el trámite en ese momento dada la saturación en consulta. Ante esto, la paciente decidió entrar en la misma y comenzó a insultar a la facultativa, saliendo poco después con un portazo".

El sindicato subraya que "lamentablemente, este suceso no es un caso aislado en este centro". "No hay vigilante de seguridad y, por si fuera poco, existe un bulo sobre el cierre del centro, cuando la realidad es que la atención médica se realiza, como dicta el protocolo oficial, de forma telefónica y presencial".

El SMA recuerda, además, que hace un mes, un paciente, "que unos meses atrás ya agredió a un facultativo del centro, volvió a las andadas y amenazó de muerte a un administrativo y a un celador". Por ello, desde el sindicato se han exigido mejoras en las medidas de seguridad del centro, "hasta ahora desoídas".

La dirección del área, por su parte, ha decidido, con el objetivo de "evitar más incidentes" o reclamaciones, "dar un trato de favor a este tipo de pacientes reincidentes, accediendo a sus injustas peticiones aunque se salten protocolos o listas de espera". En el citado centro de salud se vive tal tensión diaria que, de continuar así, se acabarán normalizando las agresiones si no hay respuesta por parte de la Administración", añade el comunicado.