El Gremio de Cines de Cataluña ha presentado este lunes un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) contra la resolución del Govern que ha obligado a parar de nuevo la actividad de las salas. Con esta vía judicial solicitan la suspensión cautelar de las restricciones dictadas por el Procicat, ante un cierre que les supone pérdidas económicas "inalcanzables e irrecuperables". 

"Ante la indefensión hemos tomado esta decisión para buscar el amparo de la justicia", ha dicho este lunes el presidente del Gremio de Cines de Cataluña, Camilo Tarrazón, que considera que la suspensión de la actividad es "arbitraria y desproporcionada".

Bajo el paraguas del Gremio de Exhibidores, un total de 20 cines de Barcelona y el área metropolitana cerrados por las restricciones por los rebrotes de coronavirus han presentado este lunes por la mañana un recurso contra la resolución del 17 de julio que adoptaba medidas por la contención del brote epidémico, como el cierre de teatros, cines y gimnasios.

El Gremio considera que la medida solicitada no perjudica el interés general puesto que las salas de cine garantizan la seguridad de los espectadores, tal como aseguran que lo han reconocido las principales autoridades científicas y médicas del país en el campo de la epidemiología.

Los cines de las demás zonas afectadas por las restricciones como Figueres o el Segrià no han presentado "de momento" ningún recurso, a pesar de que si se suspendiera cautelarmente la decisión "beneficiaría" a todos los cines cerrados de Cataluña.

A la espera del Procicat

Según ha confirmado Tarrazón, ninguno de los ayuntamientos que ha pedido la vía de excepción al Procicat para abrir los cines ha obtenido todavía respuesta. El Procicat dispone de toda la documentación aportada por los cines desde el 20 de julio. Ante la "indefensión" que supone "la carencia de respuesta del Procicat y después de más de una semana a la espera", el Gremio de Cines de Cataluña ha optado por "acelerar" una decisión a través de la vía contenciosa-administrativa.

Este sábado, el Govern abrió la puerta a revisar pronto las restricciones a gimnasios, cines y teatros en Barcelona, primera corona metropolitana y otros municipios afectados por los rebrotes de coronavirus. De este modo, se planteaba que el Procicat revisara durante esta semana la resolución aprobada el 13 de julio, donde figuran estas actividades, y adaptarse la evolución de la pandemia y también a las necesidades en ámbitos como la cultura y el deporte.

"Algunos cines no podrán reabrir"

Ante la situación de incertidumbre, los Cines Girona de Barcelona han anunciado este lunes que se ven obligados a cerrar hasta finales de agosto. "La dinámica de funcionamiento de nuestras salas necesita de cierta continuidad y esta se vio rota el 18 de julio por una decisión equivocada del Govern que ha parado la buena dinámica con la que habíamos reiniciado la reanudación", han expresado a través de Twitter.

Según Tarrazón, algunos cines esperarán que la situación se concrete, y otros no podrán volver a abrir "por culpa de unos criterios del Procicat desproporcionados e imprevisibles". "Por eso es tan importante que la solución aporte seguridad jurídica, que se descarte la vía de la excepcionalidad y se establezca una graduación en las medidas a aplicar en caso de rebrotes. Si no, estamos vendidos", asegura el representante de las salas en connivencia con Actua Cultura Segura, una comisión recientemente creada con el objetivo de gestionar el periodo de convivencia con la Covid-19.

Según un estudio realizado por el sector, se estima que las medidas sanitarias previas, es decir, las que se adoptaron durante la vigencia del estado de alarma, dejaron un 83'3% de las salas con problemas de solvencia, y que un nuevo cierre supondría problemas de solvencia para prácticamente todas las empresas del sector. Se estima que cada día de inactividad puede suponer el cierre de 1,3 empresas y sus correspondientes puestos de trabajo, con una pérdida diaria para las arcas públicas de 214.500 euros.