Ambas detenciones se han producido en sendos controles rutinarios de vehículos, que la Policía Nacional realiza con el objetivo de prevención de la delincuencia, así como para el descubrimiento de posibles delitos y sus autores, como ha sido en esta ocasión.

De los dos detenidos, uno de ellos cuenta con numerosos antecedentes policiales, principalmente por delitos contra el patrimonio, además de cinco órdenes judiciales de detención, cuatro de ellas por robo con fuerza en los juzgados de Pamplona, Tafalla, Almazán y Zaragoza, y una quinta por quebrantamiento de condena.

Junto a todo ello, el detenido, de nacionalidad rumana, tiene una orden de expulsión de territorio nacional, ha informado la Policía Nacional en un comunicado.

Asimismo, sobre el segundo de los detenidos recae una orden de detención judicial por abandono familiar. Ambos individuos han pasado ya a disposición judicial.