Ni orquestas de fuera, ni fuegos artificiales y con la mitad del presupuesto del año anterior. El Carnaval de Santa Cruz 2009, la fiesta más multitudinaria de la Isla, ni siquiera tendrán un gran escenario en la calle, ni muchos menos los invitados de glamour habituales de otros años.

Según informaba el periódico El Día fechas atrás las previsiones de gasto del Ayuntamiento son absolutamente modestas. La crisis parece que finalmente ha echado por tierra las ambiciosas expectativas del Cabildo de Tenerife para el próximo Carnaval.

Los concursos y galas se trasladarán al recinto ferial, y los escenarios al aire libre sólo serán dos, uno en La Candelaria y otro en la plaza del Príncipe.

"Santa Cruz de Tenerife ha hecho el mayor esfuerzo de austeridad de toda la historia de la democracia", ha dicho el primer teniente de alcalde de la ciudad, Ángel Llanos, respecto a este volantazo a la racionalidad, después de los lujos de la pasada edición.

"La fiesta la hace el pueblo y el Ayuntamiento a veces hasta molesta", ha justificado el concejal, quien sostuvo que la responsabilidad de la Corporación este año será "ayudar a que los verdaderos protagonistas de las fiestas tengan los recursos necesarios" para poder celebrarla.

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