Marco Ibarz ha descrito que la "sensación del pueblo y también de la comarca es diferente" respecto a hace doce días cuando se decretó la vuelta a la Fase 2 entre los días 22 y 23 de junio. Ha contado que en la actualidad los afectados, en su mayoría gente joven, están en sus casas confinadas guardando la cuarentena, pero "el brote está controlado".

En declaraciones a Europa Press, Marco Ibarz ha explicado que entre la población hay "inquietud, por el brote de Lérida, que preocupa por la proximidad, pero no hay miedo".

Ha asegurado que los ciudadanos de la comarca del Bajo Cinca respetan las medidas de seguridad "desde el minuto uno que se volvió a la Fase 2 y que todavía se mantiene". Asimismo, ha indicado que desde las instituciones se recuerdan constantemente las medidas de seguridad, que "no hay que olvidar".

Al respecto, ha abundado en que hay que cumplir con las directrices de las autoridades sanitarias y llevar la mascarilla porque "es lo único que funciona y si cumples hay mucho ganado, aunque sea un engorro porque da calor y más a los que recogen la fruta a pleno sol". "Como vuelva otro brote, volveremos al lío y será peor", ha augurado.

Para analizar la situación se volverá a reunir el próximo lunes, 13 de julio, de forma telemática con la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, junto a los otros presidentes de las comarcas que también volvieron a la Fase 2 y que son las oscenses de Bajo Cinca, Cinca Medio, La Litera y la zaragozana de Bajo Aragón-Caspe.

HORTOFRUTÍCOLA

Todas estas comarcas aragonesas que han pasado a Fase 2 acumulan, tras la revisión de casos y asignación a estos brotes, alrededor de 369 positivos.

"No se que datos que saldrán del fin de semana, pero creo que más medidas no son necesarias y la sensación es de tranquilidad", ha comentado mientras ha hecho un receso en sus tareas y ha parado de trabajar con el tractor porque la zona está en plena recolección de la fruta.

Ha explicado que desde el pasado mes de mayo y hasta septiembre es la temporada de la fruta de hueso y en toda la comarca se recoge melocotón, nectarina y paraguayo, que se destinan tanto a exportación como a consumo nacional.

"Es una zona muy buena que ofrece un producto de muy alta calidad", ha subrayado. Como dato de la producción de que se cosecha ha indicado que la empresa de Zaidín que cerró por el brote y volvió a abrir mueve 1,5 millones de kilos semanales y en esta localidad hay otras 8 empresas a las que se suman las instaladas en toda la comarca del Bajo Cinca y las otras comarcas oscenses. "Tanto Huesca, como Lérida son dos provincias con una fuerte producción hortofrutícola", ha remachado.