Si les preguntan por dos nombres de escritores amenazados, éstos dos seguro que les viene a la mente. Shalman Rushdie y desde hace unos años, Roberto Saviano es el paradigma de esta figura. El martes, ambos se encontraron en Estocolmo para hablar de la conferencia La palabra libre y la violencia.

Los dos pueden hacerlo indudablemente bien. El británico, de origen indio, Rushdie sintió durante una década el peso de los cuatro millones de dólares en los que las autoridades religiosas valoraron su cabeza. La razón, las supuestas "blasfemias" contra Mahoma que representaban Los versos satánicos.

El italiano Saviano, de sólo 29 años, se encontró como un ejercicio de periodismo como su libro Gomorra (sobre las actividades de la Camorra, la mafia napolitana) se convertía en uno de los mayores éxitos literarios en su país y él, en objetivo de los mafiosos. Lleva dos años amenazado y estas navidades se cumple la fecha límite para su asesinato, dictada desde la cárcel por un capo napolitano.

Ayer martes aparecieron juntos, según informa El País, en el gran salón de la Academia Sueca. Frente a ellos, estaban 450 invitados y rodeando el edificio, decenas de policías.

El miedo

El miedo ocupó gran parte de las intervenciones. Saviano aseguró que "la literatura da miedo. Conecta la barbarie con las cabezas y los corazones de los lectores. Y eso es peligroso. Porque pueden matarme a mí, pero ya es demasiado tarde para acabar con todo los lectores de Gomorra".

Por su parte, como veterano a novato en este terror diario, Rushdie recomendó a su colega italiano que no concediera al miedo más poder del que ya tiene.