En 2019 cerró con una facturación de 61 millones de euros, con la comercialización de 27,7 millones de litros de helado, con el lanzamiento a nivel internacional de Wao Mochi y con beneficios netos de 2,7 millones de euros, informa en un comunicado.

Helados Estiu, ubicada en Ribarroja de Túria, compró en 2016 un solar en Cheste de 70.000 m2. En él se construyeron nuevas cámaras para mejora de la logística y ahora la nueva nave para ampliación de su capacidad e instalación de nuevas líneas. La construcción, que comenzó en 2019, concluirá en 2021 y supondrá una inversión global de 20 millones de euros.

La compañía fabricó dos millones más de litros de helado en el pasado ejercicio con respecto al anterior, incrementando la facturación en 5 millones de euros. Además del buen tiempo, el éxito de los helados tipo bombón, con el lanzamiento del mini bombón oreo y un mini sándwich cookie, resultaron fundamentales.

Para este año, Helados Estiu ha relanzado sus reconocidos mochis, inspirados en el famoso postre japonés, con una cobertura de masa de arroz y relleno de helado cremoso de coco y de sorbete de mango, producto que supuso un elaborado proceso para el departamento de Investigación+Desarrollo, que, una vez ejecutada la idea, trabajó, como siempre, mano a mano, con el departamento de prescripción de Mercadona, compañía caracterizada por su modelo de Coinnovación.

El 2019 ha traído un "hito importante", el lanzamiento de una marca internacional propia, Wao Mochi, que ya ha empezado a comercializar en Holanda, Irlanda, Ucrania, Finlandia, Letonia, Alemania y Armenia.

Por el momento, esto supone un porcentaje pequeño de su facturación, pero espera que el crecimiento sea progresivo en los próximos ejercicios. Los Wao Mochis se comercializan, en sabores diversos como el chocolate, la vainilla o el té matcha. Destacan, por la innovación, el sabor tropical para veganos y el sabor caramelo o cheescake pues incluyen una salsa en su interior.

CAMPAÑA DE 2020 "MENOS PREDECIBLE"

La campaña 2020 puede resultar menos predecible porque no se sabe cómo puede afectar el descenso del turismo a raíz de la pandemia, apuntan desde la compañía. Sin embargo, podría compensarse con el buen tiempo y con la circunstancia de que niños y adultos están más en casa.

En cualquier caso, Helados Estiu, desde que nació en 1983, no ha dejado de crecer y de reinvertir beneficios tanto en I+D+i como en mejora de la producción, logística y lineales porque lo que impregna su espíritu, es la búsqueda de la excelencia de forma transversal en todos y cada uno de sus departamentos. Para ello, la empresa considera "esencial" el apoyo de sus empleados. Tal y como destaca Maria José Félix, directora general de Helados Estiu: "Para nosotros son un apoyo fundamental en la compañía y demuestran todos los días su compromiso, implicación y responsabilidad".