Alquilar una vivienda es un proceso bastante sencillo, ya que solamente se necesita llegar a un acuerdo entre inquilino y propietario sobre la duración y el precio de alquiler, sobre todo.
Una vez conseguido esto, es necesario poseer una serie de documentos, en los que están interesados e involucrados tanto el arrendador como el arrendatario.
Documentación para alquilar un piso
El papel más importante a tener en cuenta es, precisamente, el contrato de alquiler, que ha de estar firmado por ambas partes y constituirá el vínculo entre el arrendador y el arrendatario.
Este contrato de arrendamiento debe contener la identidad de ambas partes, la identificación de la finca o vivienda arrendada, la duración pactada del contrato, la renta inicial y las cláusulas que hubieran acordado las partes.
En la formalización del contrato de alquiler de vivienda es obligatorio que el inquilino haga entrega de una fianza equivalente a una mensualidad, tal y como informa la Comunidad de Madrid.
Otro de los documentos importantes a la hora de alquilar una casa, según la comunidad autónoma, es el Certificado de Eficiencia Energética. Por ejemplo, en Madrid es necesario que el propietario de una vivienda que desee alquilar disponga de este certificado y también la Etiqueta de eficiencia energética.
También se puede requerir la Cédula de habitabilidad, dependiendo de la comunidad autónoma. En Madrid este requerimiento fue suprimido en 2018. En otras nueve comunidades (Cantabria, La Rioja, Navarra, Cataluña, Asturias, Extremadura, Baleares, Murcia y la Comunidad Valenciana) sigue siendo obligatoria.
Por último, serán necesarios los documentos de identidad del propietario así como la escritura de propiedad que demuestre que la vivienda es suya.
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