Jimmy Kimmel se disculpa por disfrazarse de negro o hacer 'blackface' hace 30 años

En Estados Unidos, sobre todo, está muy mal visto actualmente lo que se denomina hacer blackface, que es, básicamente, que una persona blanca se disfrace de persona negra, pintándose la cara de color oscuro. 

Con la sensibilidad sobre los temas raciales más que nunca en el candelero tras la muerte de George Floyd a manos de la policía, muchos han querido aclarar cosas sobre esa cuestión, entre ellos el famoso presentador de televisión Jimmy Kimmel, que como cómico e imitiador, en el pasado se disfrazó de personas negras. 

"Durante mucho tiempo he sido reacio a abordar esto, ya que sabía que hacerlo sería celebrado como una victoria por aquellos que equiparan las disculpas con la debilidad y animan a los líderes que usan los prejuicios para dividirnos", dijo en sus redes sociales Kimmel. 

"No hay nada más importante para mí que tu respeto y pido disculpas a aquellos que se sintieron heridos u ofendidos por el maquillaje que usé o las palabras que dije", solicitaba el presentador, por gags que hizo en los años 90 imitando al jugador de la NBA Karl Malone. 

"Nunca consideré que esto podría verse como algo más que una imitación de un ser humano, uno que no tenía más que ver con el color de la piel de Karl que con sus músculos abultados y su cabeza calva", explicaba Kimmel. 

Y argumentaba que el racismo no tuvo nada que ver en sus imitiaciones. "He hecho docenas de imitaciones de personajes famosos, incluidos Snoop Dogg, Oprah, Eminem, Dick Vitale, Rosie y muchos otros. En cada caso, pensé en ellos como recreaciones de famosos y nada más". 

No obstante, opinaba que "mirando hacia atrás", muchos de esas caraterizaciones "son vergonzosas", y aseguró: "es frustrante que estos momentos irreflexivos se hayan convertido en un arma utilizada por algunos para disminuir mis críticas a las injusticias sociales y de otro tipo".

"Creo que he evolucionado y madurado en los últimos veinte años, y espero que sea evidente para cualquiera que vea mi programa", agregó, a la par que advertía: "no seré intimidado por aquellos que fingen indignación para avanzar en sus agendas opresivas y verdaderamente racistas".

Y es que el propio presidente de los EE UU, Donald Trump, usó el tuit de un usuario anónimo que criticaba a Kimmel para atacarle, llamándole "cómico no gracioso" y haciendo ver que había una contradicción entre las "reglas que la izquierda quiere imponer a los demás" y que dejaran a Kimmel hacer su programa.