La ola de protestas raciales que se ha extendido en Estados Unidos tras la muerte del afroamericano George Floyd a manos de un policía ha redundado en el ataque a varias estatuas de figura españolas, entre ellas las de fray Junípero Serra. Después de que una de las esculturas acabase el pasado sábado en el suelo en San Francisco, estas acciones han llegado a España, donde una imagen del santo ha terminado vandalizada en Palma de Mallorca. Pero, ¿quién fue este misionero franciscano?

Nacido en Petra (Mallorca) en 1713, este fraile fundó nueve misiones españolas en la Alta California y presidió otras quince, fue beatificado en 1988 por Juan Pablo II y canonizado en 2015 por el papa Francisco en la ciudad de Washington D.C. 

La estatua de Junípero Serra de Palma aparece vandalizada con pintadas de "racista" tras ser señalada por Podemos

Sin embargo, su figura no está exenta de polémica, pues hay sectores que consideran que en las misiones que creó, donde convirtió al catolicismo a miles de nativos, hubo abusos y maltratos a los indígenas.

Su labor evangelizadora comenzó en 1749 cuando, junto con veinte misioneros franciscanos, partió hacia el Virreinato de la Nueva España, que se convertiría posteriormente en el actual México.

La primera de estas misiones que fundó fue la de San Diego de Alcalá en 1769 -dentro del actual término municipal de San Diego-, a la que siguieron ocho más, con el objetivo de evangelizar a los nativos e integrarlos en la sociedad española.

Controversia

No obstante, la figura de fray Junípero Serra resulta controvertida. Hay quienes defienden que su obra se consagró a la defensa de los nativos de los lugares que visitó, muy lejos de posiciones como la de "colonizador" o "conquistador". Otros aseguran que maltrató a los indígenas con los que entró en contacto.

Ya en 2015 su canonización fue muy criticada por algunos sectores, que desde la beatificación del misionero franciscano, en 1988, lo habían acusado de maltratar a los indígenas. 

En 2018, la Universidad de Stanford provocó otra polémica en torno al misionero franciscano al decidir eliminar su nombre de diversas instalaciones por su trato a los indígenas californianos.

Ahora, las estatuas de este santo han sido atacadas en distintas ciudades por los manifestantes, que también han arremetido contra un busto de Miguel de Cervantes, donde hicieron pintadas.