La madrugada del este martes, 16 de junio, dos individuos se aproximaron al escaparate de una tienda y, tras forzar el cierre de la persiana metálica que lo protegía, uno de ellos golpeó el escaparate con un adoquín con la intención de acceder al interior, mientras el otro vigilaba los alrededores.

Gracias a la llamada realizada a la Policía Nacional por un testigo que presenció la escena, se pusieron en alerta varias patrullas que se desplazaron hasta el lugar y se coordinaron para lograr la detención de ambos varones, que emprendieron la huida ante la inminente llegada de los agentes.

Una de las patrullas halló al primero de los implicados a escasos metros del lugar del robo, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado. El varón presentaba un corte en una mano, lesión que se había producido al fracturar el escaparate del local.

El otro, que fue localizado en un parque próximo, al percatarse de la presencia de la Policía Nacional, se arrojó al suelo y fingió encontrarse en un serio estado de embriaguez, sin embargo su argucia fue detectada rápidamente y también fue detenido.

Mientras tanto, otros agentes localizaron el adoquín que el primer arrestado había arrojado a un contenedor y que aún estaba manchado de sangre. Afortunadamente, el robo quedó frustrado y los presuntos autores no pudieron sustraer ningún objeto del interior.

Ambos detenidos, que ya contaban con antecedentes por delitos contra el patrimonio, fueron puestos a disposición del Juzgado de Guardia.