Las acusaciones de la máxima gravedad en el Congreso han pasado a ser lo más habitual sesión tras sesión. Este miércoles, el número 2 del PP, Teodoro García Egea, acusó al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, de tener la "responsabilidad" de los miles de muertos en la crisis del coronavirus. E Iglesias le respondió asegurando que el PP está cometiendo una "traición a España" aliándose en la UE con los países que exigen recortes presupuestarios para dar ayudas a los Estados del sur.

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El enganchón entre Iglesias y Egea ya se ha convertido en una tradición en las sesiones de control semanales en el Congreso de los Diputados. El número 2 del PP exigió al vicepresidente la dimisión citando sus propias palabras de hace unos años, cuando Iglesias aseguró que "en política no se pide perdón, en política se dimite". "Eso fue antes de enchufar a sus amigos o de olvidarse de los que sufren", espetó Egea, que preguntó a Iglesias "cuántos españoles" han fallecido por la "gestión" del Gobierno.

"Vaya viaje, ha pasado usted de los indignados a los enchufados", sostuvo Igualmente el número dos del PP, que insistió en el calificativo de "monaguillo" de Pedro Sánchez con el que ya calificó la semana pasada a Iglesias. "Ha pasado de los círculos a la poltrona", zanjó. Y, para terminar, le pidió que "deje de insultar a la gente que ha estado en primera línea" contra la pandemia.

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Iglesias achacó "la provocación constante, el berrinche, la mala educación" y, en general, el tono elevado del PP a "una realidad muy triste para la democracia": que la derecha, a su juicio, "no acepta perder" las elecciones. "Si no gobiernan ustedes son capaces de cualquier cosa para recuperar el poder que entienden que les pertenece por derecha divino", lamentó el vicepresidente segundo.

Esa actitud, sostuvo, llega hasta el punto de aliarse en la UE con otros países en contra de los intereses económicos de España. "Resulta que nos tenemos ahora que enterar de que están colaborando con sus amigos de la extrema derecha europea para condicionar las ayudas europeas a recortes en los servicios públicos", denunció el vicepresidente en referencia al apoyo del PP español a establecer estrictos requisitos para los países receptores de ayudas. "Eso", insistió, "se llama traición a España", por mucho que el PP se envuelva "en miles de banderas".