Manuel Núñez Ortega, condenado a cuatro años de prisión por homicidio imprudente en el accidente de tráfico ocurrido el 11 de julio de 2004 en Mérida, en el que murieron cinco personas, ha ingresado en el Centro Penitenciario de Badajoz.

Núñez Ortega ha permanecido libre un año y diez meses después de haberse dictado la sentencia que le responsabiliza del siniestro, debido a que solicitó un indulto y su caso estaba en manos del Ministerio de Justicia a la espera de que el Consejo de Ministros lo estudiara.

El pasado día 30 de octubre ingresó en la prisión pacense para cumplir una condena de cuatro años de prisión, después de haberse rechazado su petición, en la que alegaba que no tenía posibilidades económicas para mantener a su familia y que el suceso había sido un accidente.

Un brusco volantazo

En el suceso murieron Cristina Fernández Redondo, de 27 años; su marido, José Andrés Álvarez Félix, de 26 años; el hermano de éste, David Álvarez Félix, de 23 años; y su novia, Myriam Ráez Gómez, de 20 años. También falleció uno de los ocupantes que viajaba en el vehículo de Miguel Núñez, Miguel Martín Pérez.

El Juzgado número 2 de Mérida condenó el 29 de noviembre de 2006 a Manuel Núñez a cuatro años de prisión y al pago de más de 385.000 euros por la muerte de las víctimas por conducir su turismo a más de 160 kilómetros por hora y caer en un "estado de somnolencia".

Según la sentencia, el detenido, de 48 años y natural y vecino de Almendralejo (Badajoz), conducía su vehículo por la Autovía de Extremadura, cuando el sueño le hizo perder el control del coche por unos instantes y salirse de la calzada por su margen derecha hasta tocar las bandas sonoras.

En ese momento reaccionó y dio un brusco volantazo hacia la izquierda, de modo que cruzó los dos carriles de la carretera, atravesó la mediana de la autovía, salió proyectado de ella e invadió el carril de sentido contrario.CONSULTA AQUÍ MÁS