Los trabajadores de Acciona se han concentrado ante la sede de la empresa en Zona Franca para protestar por el cierre de las plantas catalanas de Nissan, que pondrá en peligro más de medio millar de empleos en esta compañía.

En total, la decisión de la multinacional japonesa de cerrar las fábricas de Barcelona, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca (todas en la provincia de Barcelona) dejará sin empleo a 3.000 trabajadores directos y hará peligrar otros 20.000 puestos indirectos entre empresas proveedoras y subcontratas.

Los trabajadores han protestado ante la sede de Acciona, la principal empresa subcontratada de Nissan en la planta de Barcelona, con pancartas en las que se podía leer "en lucha por nuestro futuro".

Los manifestantes también han quemado algunos uniformes de trabajo al grito de "Nissan no se cierra" y han lanzado huevos contra la fachada del edificio.

UGT de Catalunya analiza la afectación del cierre en proveedores

UGT de Catalunya ha creado una comisión de seguimiento formada por las secciones sindicales de empresas proveedoras y auxiliares de Nissan, como Acciona, Magna, Drive, Marelly, Lear, Gestamp y Tachi, para analizar el impacto del cierre de las tres plantas de la automovilística nipona en Catalunya.

Y es que el sindicato ha recordado que el cierre de estas tres factorías hace peligrar unos 25.000 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, lo que supone una "onda expansiva" que podría afectar a unas 500 empresas de toda Catalunya entre empresas proveedoras y auxiliares que trabajan para Nissan, informó el martes en un comunicado.

Según el sindicato, la comarca del Barcelonès será la que sufrirá un mayor impacto, con empresas como Acciona (580 personas) y Calsonic (200), y donde la afectación por el cierre de Nissan podría alcanzar el 100% de la plantilla, o el 75% en el caso de Gestamp, por ejemplo.