Recientemente ha sido un gran éxito en términos de audiencia y viralidad el reality La isla de las tentaciones, en Telecinco. Pero ese programa tuvo un germen. Antena 3 estrenó en el año 2002 Confianza Ciega, un reality producido por Zeppelin que ponía a prueba la solidez de las relaciones de varias parejas y que a partir del jueves 4 de junio estará disponible en Amazon Prime Video.

Con una media del 22,2% de share, el programa obtuvo una gran aceptación entre los jóvenes (35% de share) y entre los espectadores de 25-44 años, ya que el 37.8% de su público provenía de esa franja de edad. En 2004, Confianza Ciega fue reemitido en Cosmopolitan, doblando la audiencia del canal.

La presentadora Francine Gálvez fue la encargada de conducir el programa, que supuso toda una revolución: “Participar en Confianza Ciega fue una apuesta arriesgada, pero ¡salimos ganando! El compromiso de todo el equipo por hacer un buen reality, cuando el género estaba casi en pañales, fue clave y por eso dejó huella en la memoria colectiva española. Me siento muy honrada de haber participado en una aventura única, que me dio grandes enseñanzas profesionales y personales, además de frases impagables como la de ‘Nube, jo tía’”.

Los participantes, que no concursaban por un premio final ni estaban aislados del exterior, disfrutaban durante 16 días de diversas actividades sin sus parejas habituales, de las que permanecían separadas a una distancia mínima de 100 metros. 

Divididas en dos casas ubicadas en el Algarve portugués, la amarilla y la azul, estas parejas convivirían con jóvenes solteros y atractivos -Los Seductores y Las Seductoras- mientras que 70 cámaras grababan, durante 24 horas al día, lo que sucedía en ambas casas, con la excepción de dormitorios y baños. 

En total, y gracias a seis señales continuas, se proporcionaron 2.300 horas de grabación que nos dejaron grandes momentos televisivos que todavía forman parte de la memoria de los espectadores y que ahora vuelven a estar disponibles.

Cada casa disponía de un lugar de visionado donde se sembraba la duda entre las parejas. Uno a uno, los participantes veían cómo había transcurrido la convivencia de sus respectivas parejas durante el día anterior con sus Seductores o Seductoras, lo que pondrá a prueba la confianza ciega en la pareja, ya que lo que ven en la pantalla puede ser realidad o ficción.

Los participantes contaban con tres comodines que podían emplear en cualquier momento y así expulsar a los seductores y seductoras de forma temporal o permanente, u observar en directo a sus parejas.

Los participantes

Quizá convenga hacer memoria sobre quiénes fueron aquellas parejas que marcaron una época y que abrieron camino en los realities. 

Nube y Rafa

Rafael, de 21 años, trabajaba como camarero y profesor de full contact. Un año menor que él, Nube era azafata de congresos. Pareja desde hace 3 años, vivían juntos en Granada. Nube nació en Buenos Aires y su infancia transcurrió en varios países. Se considera una mujer romántica y sus grandes aficiones son el cine y el teatro. Define a Rafa como su refugio sentimental. Aunque es consciente de que comenzaron muy jóvenes su relación, los años de convivencia les han hecho madurar como pareja. Fue Nube quien le animó a participar en Confianza Ciega, una prueba para “darse cuenta de lo fuerte que es el amor que sentimos y si echamos de menos a la otra persona”. El tiempo máximo que han estado separados no superaba los 3 días.

Carolina e Israel

Ella, de 22 años, estudiaba para obtener el título de Técnico Superior de Sistemas Informáticos. Con 24 años, él era socorrista de profesión, aunque entonces trabajaba como camarero. Ambos residían en León. Su relación había cumplido ya cinco años y, aunque cada uno vivía con su familia, se habían comprado un piso para marcharse a vivir juntos en cuanto pudieran. Israel era tímido y sincero. Aseguraba estar muy enamorado de Carolina y para él no existía otra mujer en el mundo. Le gustaba su pareja porque, junto a ella, ha aprendido muchísimas cosas. Aseguraba por entonces que, aunque no es un hombre fácil de enamorar, con ella “se enganchó”. Carolina es una mujer de personalidad fuerte y decidida. Una de sus aficiones es el mundo de la moda. Ella aseguraba estar segura de que Israel es la persona que mejor la comprende. Le gustaba estar muy pendiente de él y se considera muy celosa, hasta el punto de borrar los mensajes femeninos que encontraba en el móvil de él.  Contemplaron su paso por Confianza Ciega como “un reto a su relación”.

Mª José y Luis

Él tenía 37 años y trabajaba de camarero en una discoteca. Ella,  26 años, y era animadora infantil. Salían juntos desde hace tres años y vivían en pareja desde hacía dos en Barcelona. Luis es un enamorado de los deportes náuticos, en especial de la vela. Se declaraba mucho más casero que su pareja y se consideraba un hombre detallista, de carácter abierto, acostumbrado a tratar con la gente por su trabajo. Asegura que en Mª José encontró a la mujer de su vida. Ella, por su parte, creía que es una mujer de carácter fuerte y segura de sí misma. Veía en Luis a un amigo y confidente y defiía su relación como “verdadera y definitiva”. Ambos decidieron participar en Confianza Ciega para salir de la monotonía.