La crisis afecta a todos. En el Ayuntamiento de Oviedo, un concejal tendrá que apuntarse al paro para poder seguir ejerciendo como tal "a tiempo completo" si no quiere que su grupo pierda al único representante que tiene en el Consistorio. Se trata de Roberto Sánchez Ramos, Rivi, edil de la Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda (ASCIZ).

El equipo de gobierno recortará un 90% la subvención a los tres grupos políticos y suprimirá un concejal liberado de cada uno de ellos. La decisión la ha tomado el alcalde, Gabino de Lorenzo, como medida para combatir la crisis.

El ahorro será de unos 400.000 euros al año. El propio alcalde será la baja del Grupo Popular. Los socialistas aún no han designado a un concejal liberado, que perderá su sueldo con la medida de De Lorenzo.

Sánchez Ramos pensaba que lo peor que le podía pasar en su vida política era que le expulsaran de Izquierda Unida (el partido al que perteneció y al que representó en el Ayuntamiento ovetense durante tres legislaturas) a un mes de las elecciones. Con un partido nuevo y con una campaña de lo más particular (no tenía financiación), ASCIZ logró un concejal. Pero ahora tiene otro frente.

Del Ayuntamiento, el grupo recibe 40.500 euros y el concejal,50.000. Con el recorte previsto el grupo cobrará sólo las dietas, unos 19.700 euros al año. Dispondrá de 12 euros al día para hacer todo el trabajo.

Con este presupuesto, Sánchez Ramos no puede dedicarse íntegramente a la política, y ASCIZ difícilmente puede sobrevivir porque los 19.700 euros que recibirán.

Los 9 del PP

El Ayuntamiento ahorrará unos 400.000 euros. Algo menos de los que cobran Isabel Pérez Espinosa, Alberto Mortera, José Suárez Arias Cachero y Agustín Iglesias Caunedo (cada uno supera los 88.000 euros anuales).

Los nueve concejales del PP, y el alcalde se llevaron en 2007 casi 816.000 euros de los 234 millones del presupuesto. Los asesores del alcalde (Agustín de Luis y César Fernández Cuevas), 193.724 euros.

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