Unos 10.000 profesionales sanitarios de Cataluña se han contagiado de la COVID-19 durante los dos últimos meses de pandemia, lo que supone un 5 % del total, aunque los que han dado positivo han sido el 15 %, ha dicho este viernes la consellera de Salud, Alba Vergés.

Vergés ha dado esta cifra en la Comisión de Salud del Parlament de Cataluña, donde ha comparecido de forma telemática por segunda vez desde el inicio de la crisis sanitaria

La consellera de Salud ha abordado diversos datos durante su comparecencia, sobre residencias geriátricas y los cribados efectuados en estos centros, compras de material de protección para profesionales sanitarios y pruebas PCR y test rápidos que hace la atención primaria, entre otros.

Preparación para un posible rebrote

No ha facilitado datos concretos de los sanitarios fallecidos a causa de la pandemia en Cataluña y ha expuesto el trabajo de los profesionales de cara a un posible rebrote de la COVID-19 en otoño próximo, coincidiendo también con la gripe estacional.

El departamento de Salud ha almacenado unidades de protección de todo tipo (mascarillas, EPI y otros) con existencias para dos meses en previsión de un rebrote entre octubre y noviembre próximo, con 3,5 millones de unidades por semana.

También se están programando los descansos de los profesionales sanitarios para que puedan estar disponibles de cara al otoño y ha asegurado que "se empezarán ahora" los anunciados 170.000 test exclusivamente para los sanitarios, en un estudio a largo plazo que se prevé que dure varios meses.

La titular de Salud ha dicho que se han contratado a 3.527 profesionales para reforzar servicios en hospitales, atención primaria y el teléfono 061 durante la pandemia si bien no ha precisado cuántas de estas personas seguirán trabajando en el sistema sanitario público catalán a partir de ahora.

En las residencias geriátricas se han infectado unas 13.000 personas mayores, de las que 3.974 han fallecido y otras 7.500 se han recuperado, y se han hecho 93.000 pruebas PCR y test rápidos a ancianos y trabajadoras de estos centros.

Las pruebas PCR que se hacen desde el inicio de la desescalada en los territorios en fase 1 en la atención primaria, para detectar los casos de COVID-19 y a sus contactos, se hacen a criterio de los médicos y no de forma masiva, y se han hecho al 61 % de los pacientes sospechosos, ha indicado hoy.