Doce pateras han llegado a Baleares desde 2006, la última ayer, desembarcada en la isla de Cabrera con 10 personas, creyendo que era Mallorca, pero con destino Almería.

Los tripulantes, detenidos en el Parque Nacional de Cabrera, por la Guardia Civil, afirmaron que iban a Andalucía, y que, si llegaron al archipiélago, fue por la mala mar.

Los agentes creen que es "muy difícil" que no fuesen detectados con anterioridad por los cuidadores del Parque, lleno de parajes de gran belleza que están totalmente despoblados; ni tampoco que cinco de ellos sean marroquíes, cuatro argelinos y uno egipcio.

Piensan que todos proceden de Argelia y que pretenden es "despistar" y "dificultar su retorno", señaló el delegado del Gobierno, Ramón Socias, quien aclaró que serán llevados a un centro de internamiento para extranjeros en Barcelona o Valencia.

Socías puntualizó que tres de los inmigrantes fueron vistos por primera vez a las 09,20 horas de ayer por un guarda forestal de Trapsa -empresa pública que gestiona el parque- en un camino de la isla, al que pidieron agua.

Tras dar parte de ese encuentro, la Guardia Civil realizó una batida encontrando a siete más en la Cala d´es Burri, en la zona de la Platja de s´Olla, cerca de la embarcación con la que llegaron.

Ésta es de tipo recreativo, una lancha fueraborda Kahima 8460 de 85CV y cuatro metros de eslora, a bordo de la que, al parecer, partieron desde Ghazkwat -en la frontera entre Argelia y Marruecos.

Una vez sorprendidos, fueron trasladados a las 15,30 horas a Palma, pasando a dependencias de la Policía Nacional para ser interrogados, donde permanecen.

El delegado del Gobierno señaló que la segunda patera que llega a Mallorca este año no fue detectada por el radar del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) porque Cabrera carece de él, aunque se prevé dotarla de uno -de los siete que se instalarán en el archipiélago.

En total, han llegado doce pateras a Baleares, de las que cinco arribaron en 2006, otras tantas al año siguiente y, finalmente, dos más en lo que llevamos de 2008, una de ellas en enero, con nueve súbditos argelinos abordo, y la de este fin de semana.

En suma, son 130 personas las que intentaron entrar ilegalmente en España a través de las Islas en los últimos dos años y medio, cifras muy lejanas de las que se registran en Andalucía y en Canarias, donde las llegadas son cotidianas y a veces alcanzan los centenares de individuos en un día.