Más de 5.000 ciclistas, ataviados con gorro, bufanda y camiseta naranja haciendo cola en el parque del Retiro para recoger una bicicleta con la que más tarde recorrer, a dos ruedas y sin motor, más de 13 kilómetros por algunas de la calles más emblemáticas de la capital.

La imagen llamaba la atención, y no sólo porque sorprendiera encontrarse a tanto ciudadano dispuesto a hacer deporte a las ocho de la mañana de un domingo, sino por el gélido frío que se sentía a esas horas en las calles de Madrid: apenas seis grados de temperatura.

Se trataba del Madrid Bike Tour, una marcha ciclista organizada por el Ministerio de Sanidad y el Ayuntamiento para promocionar una vida sin drogas.

El evento, que lleva dos años desarrollándose en Portugal, se celebraba por vez primera en Madrid.

Las 5.000 inscripciones, que se abrieron el pasado 20 de octubre, se agotaron en tan sólo seis días, en parte debido a que por los 60 euros que valía inscribirse los participantes podían quedarse con la bicicleta.