Dos millones de españoles han superado el coronavirus desde febrero, mes en el que el brote ya danzaba por el país. Es la principal conclusión de la “primera foto” de la incidencia que la Covid-19 ha tenido en España que ha realizado el Gobierno en base a un estudio de seroprevalencia diseñado por el Instituto de Salud Carlos III con la ayuda del Instituto Nacional de Estadística (INE) y que han ejecutado el Ministerio de Sanidad, el de Ciencia y las diferentes comunidades autónomas.

Los ministros Salvador Illa y Pedro Duque han presentado junto con los responsables del trabajo los resultados de esta primera oleada, de la que se extrae el dato que prueba que la población con anticuerpos (es decir, que ha pasado el virus y, según apuntan varios estudios científicos, es inmune a él) no supera el 5%.

“No sé si es poco o mucho; es lo que es”, ha explicado Illa sin querer adjetivar esa cifra. No obstante, sí apuntó una conclusión que desacelera de facto las esperanzas de volver a hacer vida normal hasta no que haya vacuna: la inmunidad de grupo, la protección de una determinada población ante una infección debido a la presencia de un elevado porcentaje de inmunes, está lejos de ser conseguida. Para que se diera, al menos el 60% de la sociedad debería haber superado la Covid-19.

No obstante, eso ya lo tenía en cuenta el Gobierno. O eso ha asegurado Illa, que ha declarado que el plan de desescalada por fases en el que España está inmersa desde hace unos días se realizó con una previsión similar a los resultados otorgados por el estudio.

“No nos ha sorprendido que no haya inmunidad de rebaño, esto valida las hipótesis que presidieron el plan de desescalada”, ha asegurado. Además, el ministro de Sanidad ha hecho hincapié en la “variabilidad territorial” del virus, que convierte en un “acierto” el hecho de que no todo el país se desconfine al unísono.

En este sentido, cabe destacar que hay grandes diferencias entre territorios, pues unos presentan una prevalencia poblacional siete veces mayor que otros. Soria, con un 14,2% de población con anticuerpos, es la provincia en la que más incidencia ha tenido el virus, que se ha cebado especialmente con Madrid (11,3%) y sus alrededores: Segovia (12,6%), Guadalaraja (10,9%) o Cuenca (13,5%).

En cambio, destaca la poca incidencia de la Covid-19 en la costa. La tasa de población con anticuerpos en Andalucía oscila entre el 1,5% y el 4,4%, números similares a los de Galicia, la Comunidad Valenciana, Murcia, Navarra o Asturias. Barcelona, por su parte, es una excepción en su autonomía: su prevalencia es de un 7,1%, lejos del 1,6% de Tarragona o del 2,5% de Girona.

Esta “gran variabilidad geográfica” también la ha señalado Marina Pollán, directora científica del estudio, que ha asegurado, sin embargo, que no ha habido diferencias entre grupos de edad y sexos, pese a que el número de contagios en niños ha aumentado en los últimos días. Si, de media, los contagios de los que se conoce la edad aumentaron un 21,8% entre el 26 de abril y el 12 de mayo, este incremento fue del 35,3% en menores de 10 años y del 40,9% en edades de 10 a 19 años. Pollán, además, ha alertado de que “existe el peligro” de un “posible repunte” y, por ello, ha pedido cautela: “Estamos muy lejos de poder afirmar que existe inmunidad de grupo y, por tanto, existe el peligro, pues podría haber un repunte si hubiera un contacto con personas portadoras del virus”.

Preguntada sobre si es posible que el porcentaje de prevalencia cambie, ha sido tajante para afirmar que sí y ha recordado que aún quedan dos fases más. Para la oleada presentada este miércoles se han realizado llamadas telefónicas a 35.000 hogares de toda España elegidos al azar. En paralelo, se han tomado muestras a los participantes en los centros de salud y domicilios. A estos se les ha hecho un test rápido de determinación de anticuerpos en sangre, mediante un pinchazo en el dedo y se ha tomado una muestra de sangre para asegurar la fiabilidad de los resultados.

Así pues, los resultados presentados no incluyen la información de ese tipo de pruebas, que miden, según recuerdan desde el Gobierno, los anticuerpos mediante inmunoensayo, ya que no se tienen los resultados de todas las comunidades autónomas. En las oleadas siguientes, será posible conocer la evolución de la prevalencia y los cambios observados durante el tiempo en los participantes.