La Generalitat ha intervenido la residencia Mossèn Vidal i Aunós de Barcelona y ha encargado temporalmente la gestión a la Fundación Vella Terra. Se trata de la residencia número once que el Govern interviene desde el inicio de la crisis del coronavirus. 

El Departamento de Salut ha explicado que este centro está actualmente en un 52,6% de ocupación, ya que una parte importante de sus residentes fueron derivados a centros hospitalarios. 

El regreso de estos residentes es inminente y se ha constatado la falta de recursos por parte de la entidad gestora actual para atender este nuevo volumen de personas, sobre todo en el ámbito de personal. 

La asociación de 'Familiares de la tercera edad en residencias' ha presentado una denuncia conjunta ante la fiscalía contra 11 centros, y esta es una de ellas.

Además, se da la circunstancia de que los Mossos d'Esquadra detuvieron a dos cuidadores de esta residencia por presunto maltrato y abusos sexuales a una pareja de residentes.