La Policía de Pakistán evitó un matrimonio infantil en la ciudad de Karachi y detuvo al clérigo que presidía la ceremonia entre una niña de 4 años y un niño de 7 años.

La ley establece que para casarse en Pakistán hay que tener, al menos, 18 años. Sin embargo, algunas leyes islámicas permiten a las niñas casarse una vez llegan a la pubertad. Pese a todo, en Pakistán todavía se celebran matrimonios de hijos que sirven para atajar conflictos o pagar deudas.

La Policía pakistaní llegó a la vivienda donde se celebraba la boda alertada por los vecinos, quienes denunciaron que el padre de la niña aceptó casarla a cambio de 500.000 rupias (4. 836 euros).

"Notamos que había una celebración en la casa. Cuando entré,vi que era una niña la que se estaba casando" afirmó un testigo a la prensa. Otros testigos dijeron que este matrimonio intentaba zanjar una disputa entre clanes familiares. La Policía logró detener al padre del niño, no al de la niña que se dio a la fuga.