Este fin de semana se han permitido los primeros paseos y salidas para hacer deporte tras siete semanas de confinamiento contra el Covid-19. Los ciudadanos se han echado a las calles, han copado las aceras y también las calzadas, a las que muchos viandantes se bajaban para guardar la distancia mínima de dos metros de seguridad establecida para evitar nuevos contagios cuando las aceras no lo permitían por su reducido tamaño.

Algunas ciudades como Zaragoza, Barcelona, A Coruña, Sevilla, Vigo, Albacete, Valencia, Pamplona o Valladolid han anunciado planes para peatonalizar determinadas vías durante los fines de semana o de forma provisional y a modo de prueba para evitar aglomeraciones. Todas ellas se han echo hecho de la orden del BOE del pasado viernes 1 de mayo, que dictó las condiciones de las primeras salidas de los mayores de 14 años, y en el que se instaba a las entidades locales a "facilitar el reparto del espacio público a favor de los que caminan y de los que van en bicicleta, en ese orden de prioridad".

En Madrid, donde los parques y espacios verdes permanecen cerrados, las estrechas aceras de muchas calles han llevado a los peatones a ocupar las calzadas, que además registraban un tráfico rodado muy inferior al de una jornada normal. En redes sociales y bajo la etiqueta #TomarLaCalzada, muchos fueron los usuarios que compartieron fotos y vídeos en los que se observaron a los caminantes abrirse paso por las calzadas ante la cantidad de gente en las aceras.

Preguntado en Onda Cero por esta cuestión, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, afirmó que este lunes que "estamos barajando los distintos escenarios que se pueden producir en relación con el próximo fin de semana. Dentro de esos escenarios se está estudiando en estos momentos la posible peatonalización de determinadas áreas con el objeto de que no se produzcan mayores aglomeraciones que las que ya se han producido y poder respetar las distancias de seguridad".

Carta de Ribera a la FEMP

Ribera presenta un plan para impulsar la bicicleta en la desescalada en municipios con más de 5.000 habitantes

La semana pasada, la vicepresidenta cuarta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, envió una carta a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) en la que solicitaba que las entidades locales españolas potenciaran el empleo de la bicicleta como alternativa de transporte limpio y sostenible para la salida gradual de la crisis sanitaria provocada por Covid-19. Proponía, entre otras medidas, habilitar carriles bici provisionales, impulsar sistemas de alquiler de bicicletas compartidas, crear corredores en zonas periurbanas o facilitar y reforzar la movilidad combinada (bicicleta y transporte público).

Fuentes de la Concejalía madrileña de Movilidad, con Borja Carabante al frente, afirman a 20minutos que la capital, después de analizar la propuesta de la ministra, cree que "es mucho más importante continuar con la planificación de ejecución de carriles bici ya proyectados a ejecutar por el Ayuntamiento durante este año y el que viene". Por otro lado, exponen, "durante este año ha habido una apuesta clara por la bicicleta como la ampliación de BiciMad", que ya ha reabierto y en 2019 se ejecutaron un 156,5% más de aparca bicis. Asimismo, desde el departamento de Carabante anuncian que han redactado "un manual de diseño de infraestructuras ciclistas, que sólo lo tiene Berlín, y que estamos a punto de publicar con diferentes carriles bici".

Este lunes, el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha sentenciado que "la movilidad ha cambiado por completo" y "los ayuntamientos deben adaptarse". Por ello, ha apostado por promover la "micromovilidad", "el caminar" y por "regular los horarios comerciales" para laminar las horas punta.

¿Cómo debería ser la movilidad urbana postCovid?

"La movilidad urbana postCovid no debería ser diferente de como tendría que haber sido antes: fomentar los traslados a pie, en bici y en transporte público". Quien habla es Marta Serrano, ingeniera de caminos, consultora de movilidad y fundadora de Mujeres en Movimiento. "La mayoría de trayectos están por debajo de cinco kilómetros, una distancia factible en bici pero en Madrid hay grandes arterias como el paseo de la Castellana o la calle Ourense que no están preparadas para la bici". 

Le preocupa el mensaje que se está trasladando a raíz de la crisis sanitaria: uso del vehículo privado como alternativa al transporte público, donde la mayor afluencia de gente aumenta el riesgo de contagio. "Volver al coche sería claramente un error. Nuestras ciudades volverían a los atascos de dos o tres horas, con el consecuencia empeoramiento de la calidad del aire y la ineficacia también económica, pues es una pérdida de tiempo".

"Para crear un carril bus o bici solo se necesita pintura y para peatonalizar una calle de forma provisional, una valla"

Serrano augura que la implantación del teletrabajo y -"por desgracia"- el paro, reducirán los trayectos. La experta plantea la creación de carriles bus en los que este medio se libre de los atascos y pueda ir más rápido, lo que supondría un aumento de su frecuencia. En cuanto al metro, propone hacer como en grandes ciudades como Londres o Nueva York, donde no todos los trenes realizan el trayecto completo, sino que cubren las paradas centrales únicamente para ampliar así también su frecuencia. Y es que, explica, "nadie tiene stock de flota de vagones o autobuses, se construyen ad hoc y nos iríamos a un año".

Recuerda, además, que para crear un carril bus o de bici "solo se necesita pintura", y para peatonalizar una calle, "cortar el tráfico con una valla, como en cualquier verbena".

Iniciativas en ciudades

Algunas de las ciudades españolas que han encarado la desescalada con cambios en el uso del espacio público son, por ejemplo, Pamplona, cuyo Ayuntamiento ha anunciado que impulsará carriles bici temporales, o Zaragoza, Sevilla y Vigo, donde se peatonalizan calles céntricas durante los fin de semana. En Valencia han anunciado la ampliación de aceras y creación de carriles bici. En Albacete comienzan este lunes a peatonalizar calles. Cáceres también restringirá el tráfico de forma provisional de algunas vías.

"Esta crisis nos ha permitido comprobar que las ciudades pueden ser más silenciosas y limpias"

Un "aluvión" de propuestas que para el responsable de movilidad de Greenpeace, Adrián Fernández, ya no son casos aislados como antes podían ser Vitoria o Pontevedra. "La movilidad sí va a cambiar", asegura. Al igual que Serrano, señala que el teletrabajo y el desempleo cambiarán la forma de movernos por las ciudades, pero también aspectos que esta crisis de la Covid-19 ha puesto en valor como el comercio de proximidad y los desplazamientos cortos a pie. "Esta crisis nos ha permitido comprobar que las calles pueden ser más silenciosas, que el aire puede ser más limpio, que podemos andar más y comprar más cerca. Deberíamos plantearnos las prioridades en el uso del espacio público, pues cuando hay menos coches la gente se ha lanzado a salir con bicicletas". 

"Priorizar el vehículo privado es suicida"

"Las calles no son más que almacenes de coches en muchos casos. Llevamos tiempo denunciando que por qué el peatón, que está en todas partes, no es el protagonista del diseño de las calles, pensadas en cambio en la fluidez del tráfico", expone.

"Las calles no tienen al peatón como protagonista de su diseño. Se diseñan las calles pensando en la fluidez del tráfico"

Fernández es "muy crítico" con los mensajes que se están dando para priorizar el vehículo privado: "Es una gran irresponsabilidad. Las ciudades no admiten más coches. Es una alternativa suicida". Sin embargo, a lago plazo, sí se considera optimista. Sin embargo, considera "incomprensible" que la capital, Madrid, no tome las medidas "eficientes y sencillas" que sí están desarrollando otras urbes para devolver a los peatones el uso seguro del espacio público. 

En este sentido, Fernández insta al Ayuntamiento de Madrid a recuperar la peatonalización del Paseo del Prado, la calle Fuencarral y el Paseo de Camoens durante los fines de semana, una medida que quedó suprimida con la declaración del estado de alarma pero que no se ha restaurado para los primeros paseos y salidas de este fin de semana.